Estrechando el cerco alrededor del Planeta X (no, no se ha descubierto un noveno planeta del sistema solar)

Por Daniel Marín, el 20 enero, 2016. Categoría(s): Astronomía • Sistema Solar ✎ 117

¿Se ha descubierto un nuevo planeta más allá de Neptuno? Pues si hacemos caso al revuelo de las últimas horas en las redes sociales, la respuesta podría ser afirmativa. Podría, pero no lo es. Para bien o para mal, por el momento nuestro sistema solar sigue teniendo ocho planetas. Por si alguien no sabe de lo que estoy hablando, todo viene a raíz de la publicación de un artículo de Mike Brown y Konstantin Batygin sobre la posible existencia de un noveno planeta. Este paper probablemente hubiera pasado desapercibido para el gran público si no fuera por el hecho de que Brown es el descubridor del planeta enano Eris, un descubrimiento que, como todos sabemos, provocó la ‘destitución’ de Plutón de la categoría de planeta.

Más pruebas de que podría existir un noveno planeta más allá de la órbita de Neptuno (Caltech AMT).
Más pruebas de que podría existir un noveno planeta más allá de la órbita de Neptuno (Caltech AMT).

Una vez aclarado que no se ha visto ningún planeta nuevo, vale la pena revisar el artículo de Brown y Batygin, porque ciertamente es muy interesante. Resumiendo, lo que han hecho los dos astrónomos es analizar las órbitas de seis objetos transneptunianos (TNOs) y han llegado a la conclusión de que sus características pueden explicarse con la presencia de un planeta de gran tamaño situado a gran distancia del Sol en una órbita excéntrica. La hipótesis de un noveno planeta -a veces también denominado Planeta X- no es nueva y ha sido propuesta desde hace décadas por multitud de investigadores, pero en los últimos años el número de pruebas circunstanciales no ha parado de aumentar. Primero fue el descubrimiento de Sedna en 2003 por el propio Brown y, más recientemente, el de 2012 VP113 en 2014.

Ambos cuerpos menores tienen un tamaño significativo y poseen una órbita muy, pero que muy extraña. Su alta excentricidad hace que la diferencia entre la máxima y mínima distancia al Sol sea increíblemente grande (tan increíble, de hecho, que cuando se descubrió Sedna muchos astrónomos no podían creer que tuviese una órbita con esos parámetros). Esta característica parece a priori ser similar a la de muchos cometas, pero Sedna y 2012 VP113 se diferencian en que su perihelio está situado más allá de cualquier planeta del sistema solar. Por ejemplo, Sedna se acerca al Sol hasta las 76 UA (11250 millones de kilómetros), mientras que su afelio está a unas alucinantes 937 UA (140 550 millones de kilómetros). Por su parte, 2012 VP113 se sitúa entre las 80 UA y las 450 UA. ¿Cómo han llegado a tener estos cuerpos unas órbitas tan excéntricas sin haber sufrido encuentros con los planetas gigantes del sistema solar? Misterio.

asa
Órbitas de Sedna, 2012 VP113 y otros TNOs que podrían señalar la existencia de un noveno planeta. Se aprecia que los perihelios de los cuerpos coinciden más o menos en la misma región del espacio (Batygin et al.).

Para colmo, el perihelio de ambos cuerpos coincide aproximadamente en la misma región del espacio. Y no solo eso. Los dos astros tienen sus perihelios situados cerca de la eclíptica -técnicamente el plano de la órbita terrestre, pero que también hace referencia al plano donde se encuentran los planetas del sistema solar- y la inclinación de sus órbitas es de unos 30º. Además durante su paso por la eclíptica ambos lo cruzan de norte a sur. Estas coincidencias podrían ser solo eso, coincidencias, sobre todo teniendo en cuenta que dos objetos no constituyen precisamente una muestra estadística demasiado amplia y que las técnicas observacionales actuales favorecen los descubrimientos de objetos transneptunianos cerca de la eclíptica. Pero también podría ser una prueba de que algo  perturba gravitatoriamente las órbitas de Sedna y 2012 VP113 al mismo tiempo, sobre todo porque otros objetos transneptunianos de menor tamaño también muestran orientaciones similares.

Los descubridores de 2012 VP113, Scott Sheppard y Chad Trujillo, ya propusieron en 2014 que ese algo podría ser un noveno planeta con una masa cinco veces mayor que la de la Tierra situado en una órbita circular más allá de Neptuno (a 250 UA). Lamentablemente, las simulaciones numéricas de las interacciones de esta hipotética supertierra no logran explicar el comportamiento de Sedna y 2012 VP113. Por eso Sheppard y Trujillo llegaron a proponer un encuentro cercano con una estrella o una enana marrón como el culpable de todo este desaguisado orbital, pero una visita de este tipo habría dejado huellas en las órbitas de los cuerpos del sistema solar interior que no vemos por ningún lado. Desesperados, otros investigadores han sugerido que la explicación podría estar en las perturbaciones gravitatorias entre los objetos transneptunianos similares a Sedna. Sin embargo, los datos indican que no existen tantos objetos de este tipo como para causar la distribución de órbitas observada (a pesar de todo, esta no es una hipótesis que se pueda descartar a la ligera).

Y es en este contexto donde aparece el artículo de Brown y Batygin. Los dos investigadores han analizado las órbitas de Sedna, 2012 VP113 y otros cuatro objetos transneptunianos (2010 GB174, 2004 VN112, 2013 RF98 y 2007 TG422). Estos últimos, con órbitas muy excéntricas, han sido elegidos de tal forma que se puede descartar el que hayan sufrido interacciones gravitatorias con Neptuno en el pasado (este punto no es nada fácil de demostrar, por cierto). Como hemos visto, Sheppard y Trujillo ya demostraron que un Planeta X con una órbita circular no es una alternativa viable, por lo que Brown y Batygin buscaron otras órbitas posibles. Y, contra todo pronóstico, la encontraron: un planeta situado en una órbita excéntrica (e=0,6) cuyo perihelio sea opuesto al de los seis cuerpos estudiados sería el causante de sus curiosos parámetros órbitales. A pesar de su extraña órbita, las simulaciones indican que el Planeta X sería estable y tardaría entre diez y veinte mil años en dar una vuelta al Sol (!), pero en ningún caso se acercaría a menos de 200 UA (30000 millones de kilómetros) del Sol. Además, las órbitas de los seis objetos transneptunianos estudiados estarían en resonancia con la de este hipotético noveno planeta -del mismo modo que la órbita de Plutón y los plutinos está en resonancia con la de Neptuno-, evitando que pudiesen pasar cerca del mismo y ser expulsados del sistema solar.

sas
La órbita del hipotético noveno planeta y la de los TNOs estudiados (Caltech/R. Hurt (IPAC)).

Hay que subrayar que el artículo no menciona ni el tamaño ni la masa de este planeta y tampoco hace referencia a su posible origen. Las observaciones del telescopio infrarrojo WISE descartan que pueda haber un planeta gigante a esa distancia, de ahí que se haya especulado con que se trate de un minineptuno o una supertierra. Varios modelos de formación del sistema solar, como el Modelo de Niza, predicen que alrededor del Sol se formaron originalmente cinco planetas gigantes, uno de los cuales acabó por ser expulsado. El planeta de Brown y Batygin bien podría ser este quinto planeta, pero no está nada claro. Este modelo favorece un planeta del tamaño de Neptuno, mientras que las observaciones sugieren que es más probable que el noveno planeta sea un mundo ligeramente menor, como una supertierra de entre una y diez masas terrestres (este último dato es el que se ha usado para la simulación del artículo). Dependiendo de su tamaño preciso, los parámetros orbitales serán distintos, lo que sin duda provocará bastantes dolores de cabeza a los potenciales cazaplanetas que se atrevan a buscarlo.

Si son correctos, los resultados de Brown y Batygin permitirán acotar el espacio de búsqueda del Planeta X y facilitar su descubrimiento (a no ser que ALMA nos dé una sorpresa). Mientras tanto, otra prueba indirecta de la existencia de este planeta sería la presencia de una nueva población de objetos transneptunianos con órbitas perpendiculares a la del nuevo mundo. De hecho, cinco TNOs ya conocidos entran precisamente dentro de esta descripción, lo que refuerza, y mucho, la hipótesis de Brown y Batygin. Si alguien se pregunta cómo es posible que todavía no hayamos visto a este noveno planeta y sin embargo seamos capaces de observar cuerpos más pequeños como Sedna es porque, muy probablemente, en estos momentos se halle cerca del afelio (las leyes de Kepler nos dicen que es más probable que se encuentre por esta zona), o sea, muy lejos del Sol.

En azul, las órbitas de TNOs conocidos que concuerdan con la presencia del noveno planeta (en naranja) (Caltech/R. Hurt (IPAC)).
En azul, las órbitas de TNOs conocidos que concuerdan con la presencia del noveno planeta (en naranja) (Caltech/R. Hurt (IPAC)).

Resumiendo, Brown y Batygin no han descubierto el Planeta X ni son los primeros en proponer su existencia. Pero, a diferencia de sus predecesores, han predicho con bastante precisión sus posibles parámetros orbitales y han presentado pruebas muy sólidas de que es real. Cuando Mike Brown anunció el descubrimiento de Eris, durante un breve periodo de tiempo fue conocido como el descubridor del décimo planeta hasta que la Unión Astronómica Internacional decidió crear la categoría de planeta enano. Si el Planeta X está ahí fuera realmente y se ajusta a la predicción, es posible que, a pesar de todo, Brown termine siendo recordado como el descubridor del noveno planeta del sistema solar.

(fuente: http://www.findplanetnine.com/).
(fuente: http://www.findplanetnine.com/).

Vídeo sobre el ‘descubrimiento’:

Referencias:



117 Comentarios

  1. Qué curioso que veamos a todos los pequeños desviados y no veamos al grandote.

    ¿Es posible que estuviera y ya no esté, porque otro encuentro estelar lo haya arrancado de su órbita? ¿O tal encuentro también debería haber distorsionado las órbitas de los pequeños?

      1. Buenas tardes, he leído detenidamente el artículo lastimosamente soy ignorante de estos estudios y por eso he decidido buscar explicaciones claras a este tema. Gracias a mi ignorancia vi algunos videos por YouTube que me dejaron muy asustada hablando de este planeta, así que quiero saber si ¿es verdad que el pasará a 10 millones de años luz de la tierra (no se que son años luz) en fin que esto ocasionará el fin de este Mundo. Supuesta mente para este año y que entrará a la atmósfera el 17 de octubre 2016 ? ¿y que el gobierno no quiere que nadie sepa para no crear pánico? Les agradecería mucho su respuesta y por favor pueden explicarme de manera que yo (una persona ignorante en este tema) pueda entender Gracias. 🙂

  2. sabía que no me defraudarias y desde que leí esta tarde la noticia en la prensa estaba esperando tu entrada.
    Y por cierto ha sido todo un gustazo poder leerla.
    Y respecto al hipotético planeta sólo sirve para demostrar que mirando a las estrellas estamos prácticamente ciegos y lo inmenso y desconocido que es el sistema solar.

  3. ¿Podríamos realmente detectar ese planeta si está cerca de su afelio? Porque a una distancia tan colosal, y a las temperaturas a las que estaría… Para ese hipótetico cuerpo, el Sol será poco más que una estrella más brillante que el resto.

    Por otra parte, ¿Hasta qué punto alcanza la influencia gravitatoria estable del Sol? Me refiero a que, de acuerdo, los encuentros con otras estrellas son escasos, pero necesariamente tienen que perturbar la órbita de un cuerpo que esté tan lejos. ¿Se sabe cuándo fue ese último encuentro cercano?

    Demasiadas preguntas. Pero la más apasionante, ¿Nos atreveríamos a embarcar una sonda hasta ahí, si llegáramos a localizarlo? Tardaría décadas… por no hablar de que habría que construir emisores y receptores como un orden de magnitud más grandes para poder escuchar lo que dijera. Vaya, es tarde y mi imaginación se desata.

    Muy buen artículo como de costumbre, Daniel.

    1. Las estrellas más cercanas a nuestro sistema están a años luz de aquí, dudo mucho que ejerzan alguna influencia sobre la órbita de ese supuesto planeta.

      1. La más cercana es Alfa Cenatauri a 4,3 años luz de aquí aproximadamente y teóricamente la gravedad de un cuerpo afecta a otro aunque este a distancias increíbles, aunque cuanto más lejos, más tiende a cero, pero nunca a cero como tal jeje

  4. Excelente como siempre Daniel, muchísimas gracias, su artículo merece ser difundido para aclarar muchas dudas y rumores, pero como siempre es bueno saber y hacer entender a muchas personas que la astrofísica como ciencia siempre estará sujeta a nuevos descubrimientos, y reajustas, que nada está escrito y aún faltan muchas cosas por conocer. Gracias nuevamente.

  5. Gracias por el artículo porque en otros sitios ya están vendiendo que «se ha encontrado el noveno planeta», cuando hasta que no se detecte -y si se puede determinar una órbita exacta mucho mejor- no hay en el mejor de los casos más que pruebas indirectas.

  6. Creo que WISE va a haber que irlo archivando en la cacota. Ya han aparecido una media docenilla de cosas que tendría que haber visto y no vio.

    El estudio no sólo no es nuevo, ni siquiera es original. Hay decenas de estudios sobre esto, pero claro, no son de Mike Brown (ni su puta madre), que evidentemente lo que quiere es colgarse la medalla, yo aún recuerdo el numerito histérico que montó con lo de Haumea, ahora por lo visto co-descubierto por él y Ortiz (el Ortiz ya no es un chorizo robadescubrimientos). Hasta donde sé, dos astrónomos de la Complutense (Carlos y Raúl de la Fuente Marcos) ya propusieron no hace tanto no uno, sino dos planetas a 200-250 UA y cada uno con al menos 10 veces la masa terrestre. No creo que sean ningunos cracks, debe haber cienes de estos estudios por todo el mundo adelante. Y es que la ciencia avanza pero a mí no me pises, que mis cacharros cuestan una pasta y tengo que chupar cámara.

    Está bastante claro que del sistema solar conocemos lo mismo que de nuestro planeta en tiempos de los romanos: prácticamente nada.

    1. Motivado por tu visceral comentario he ido a buscar a esos astrónomos que mencionas y he encontrado este artículo de SINC del 13 de enero:

      http://www.agenciasinc.es/en/News/Trans-Neptunian-objects-suggest-that-there-are-more-planets-in-the-solar-system

      Lo interesante del artículo de Batygin y Brown, tal y como lo entiendo yo, es que postula la forma y parámetros de la órbita, cosa que no se había hecho. No hace falta echar tanto fuego por la boca porque los de la Fuente Marcos aparecen citados en el primer párrafo de la introducción.

  7. Me gustan las simulaciones artisticas de planetas, como el de la portada de esta entrada. ¿Alguien sabe como se hacer? ¿¨photoshop.. o algo mas? que me gustaria hacer mis propias interpretaciones de planetas extrasolares y hipoteticos.
    saludos

  8. Se se descubriera semejante planeta, seria la noticia del siglo. Y la flota de sondas enviada a su encuentro también seria digna de mención.

    1. Mucho me temo que no se lanzaría ni una sola sonda al encuentro de dicho planeta, hace muuuuuchos años que se descubrieron Urano y Neptuno, y ya me dirás cuantas sondas enviaron.

    2. La notica del siglo sería que se encontrase vida en algun sitio que no fuese la tierra en mi modesta opinión. Yo soy un poco escéptico acerca de este descubrimiento.

  9. Ola, quizá lo que aventuro es imposible pero… no podría la New Horizons, que anda por aquellos lares, aportar información a medida que se interne en el Cinturón de Kuiper?? No sería factible detectar de alguna forma estas «presencias»??

  10. Cuando yo era niño e iba al colegio (debía de tener unos 12 años, a principios de los 80), ya comentó un profesor en clase que había indicios para un planeta más allá de Plutón. En aquella época se le apodaba «Transplutón» provisionalmente.

  11. Un artículo con el rigor y sosiego habitual. Es una gran fortuna disponer de una fuente de información así. Gracias Daniel.

    Tiene pinta de que si el cuerpo existe, la resonancia hará que esté cerca del afelio. De la misma forma que estamos detectando a Sedna y 2012 VP113 por estar relativamente cerca del perihelio, es probable que existan más cuerpos de ese estilo que podrían reforzar la hipótesis de este Planeta X, pero que estén tan lejos que sean indetectables.

    Me gustaría que Planeta X existiera. Me gustaría que fuese una supertierra (de esas que hay tantas por los sistemas estelares que detectamos tan lejos).

    Si se siguen acotando los parámetros y reforzando las pruebas, supongo que al final una carrera en la búsqueda del X. Desgraciadamente para las figuras románticas tipo Percival Lowell o Clyde Tombaugh, esta vez será casi imposible detectarlo al viejo estilo.

    1. El sistema funciona de tal manera que a alguien hay que colgarle la medalla. No pocas veces a uno que pasa por ahí. Lo de Tombaugh fue pura chiripa, casi casi lo de Herschel también (de hecho, fue visto antes decenas de veces, siempre se lo confundió con una estrella). En cambio lo de Neptuno fue más científico, por eso tiene dos codescubridores.

      Tengo la sospecha, porque soy así de mal pensado, que en realidad tienen una idea bastante precisa de dónde debe estar, pero no pueden verlo, no son capaces de detectarlo o como se quiera definir (y eso que tienen a su disposición el mejor instrumental del mundo disponible, es seguro que están ahora en ello con todo lo que pueden). Esto quiere decir que cualquiera puede hacer la primera detección visual (que será oficialmente el descubridor), así que es normal que publiquen ahora esto para ir cogiendo sitio, al menos todo el que puedan. Esto de los secretismos siempre es mal rollo, pero peor aún cuando directamente no hay pasta por medio (patentes farmacéuticas, p.ej.).

      A mí lo que me fastidia es que como la noticia viene del Papa, o sea de Brown, amplificación máxima en toda la maquinaria del régimen (=prensa generalista, TV mierdosa, etc.). Si esto lo hiciesen los chinos, sí, le harían un huequecito (si eso) y gracias, y si fuesen qué sé yo, los guatemaltecos, directamente se choteaban de ellos.

  12. A estas horas, legiones de frikis, conspiranoicos y lunáticos en general tienen que estar preparando comentarios sobre el «descubrimiento» de Hercólubus, el planeta místico que se acerca cada cierto tiempo a la Tierra…

    Pero bueno, dejando las tonterías de los cenutrios habituales, un planeta de ese tamaño y a esa distancia sería un interesantísimo objetivo para una Misión Precursora Interestelar (Interstellar Precursor Mission o IPM) a mediados de este siglo o en su último tercio .

    Este tipo de misiones ya fueron definidas a finales de los años 70 del siglo XX. La idea es lanzar una sonda propulsada por un sistema eléctrico-nuclear que alcanzase una distancia de 370 Unidades Astronómicas (55.500 millones de kilómetros) en un tiempo de vuelo de 20 años. Tenéis más información en:

    http://www.daviddarling.info/encyclopedia/I/Interstellar_Precursor_Mission.html

    Saludos

    1. Sé que tienes buena intención, pero no alimentes a los trolls. Con frecuencia eres el primero en comentar ideas de lunáticos, dándoles así propaganda indirecta.

      1. ¿Mande?
        No entiendo tú comentario. Y ni suelo comentar ideas de lunáticos ni les alimento. Lo que sí hago en pitorrearme de ellos cuando aparecen por aquí o por otros foros: les ridiculizo y pongo en evidencia sus disparates para que otros (especialmente los más jóvenes) no les hagan caso.

        Lamentablemente, vivimos en una sociedad que podría calificarse de funcionalmente analfabeta en cuestiones científicas y por ello hay que combatir a las legiones de mentirosos, troleros y aprovechados que circulan por la red. Y que los chalados de turno aprovecharán esta noticia para soltar sus sandeces es tan evidente como que los impuestos y la muerte son inevitables.

        1. Haces bien en combatir a esos chalados, aprovechados y/o supersticiosos, y generalmente lo haces muy bien. Mi comentario pretendía dar un consejo táctico a una estrategia acertada: no ser el primero en sacar el tema. En este caso en concreto no te has «pitorreado de ellos cuando aparecen por aquí», sino «pitorreado» preventivamente, por así decirlo. Y me parece que es contraproducente porque muchos curiosos pueden buscar por ahí qué es aquello a lo que haces alusión…

    2. Y ¿Porque esperar al descubrimiento del Planeta X?

      ¿Acaso Sedna no es completamente misteriosa e interesante?

      Un planeta enano con ese tamaño, esa órbita tan extraña y a esa distancia sin duda merece una gran sonda, diseñada especialmente para ella…Sin duda descubriríamos cosas fantásticas y aceleraríamos nuestra tecnología…

      un s2

      1. Hombre, un mundo varias veces más grande que la Tierra sería un reclamo más espectacular que Sedna para el gran público. Pero después del éxito de la New Horizons está claro que ahí fuera hay cosas realmente espectaculares.

  13. Gracias por ofrecernos un artículo especializado tan rápidamente, como siempre. Nunca te lo agradeceremos lo suficiente.

    Los cálculos para descubrir este tipo de planetas tienen que ser muy difíciles con la cantidad de objetos transneptunianos que debe haber, y además pertenecientes a diferentes tipos. Ya se irá viendo. Por cierto, que sería un planeta muy diferente a los 8 conocidos por su órbita, quizá se le podría clasificar como «planeta separado» igual que a Plutón «planeta enano» (lo digo un poco en broma pero no del todo), y ya no tendría mucho sentido llamar a Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno planetas exteriores.

    1. Entiendo que Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno serán siempre planetas exteriores, eso no va a cambiar… la gran pregunta es como se bautizaría a ese planeta X de, pongamos por ejemplo, 10 veces la masa de la Tierra… un planeta, sin más? Planeta transneptuniano?

      Porque está claro que con ese tamaño no se le podría considerar planeta enano, como sí hemos hecho con los demás cuerpos de entidad que se han descubierto en el cinturón de Kuiper.

  14. Se sabe en qué punto de su órbita estaría?, lo digo porque según las interpretaciones de Zecharia Sitchin, que no sabía nada de astrofísica, ni biología planetaria, ya que el solo era un ávido y destacado traductor de Sumerio antiguo, el supuesto doce planeta pasaría cerca del Sistema Solar cada 3,600 años aproximadamente.

    1. Pues como era de esperar, difunto Sitchin no ha tenido suerte con su «apuesta» (te recuerdo que en la época que Sitchin hablaba de Nibiru, ya se hablaba de «transplutón»). Se le estima un período orbital en el entorno de los 15000 años. Vamo que no encaja con Nibiru no apretando fuerte…

      Por cierto, Sitchin no era precisamente «destacado» traductor. De hecho sus traducciones no están respaldadas por traductores «de verdad» del sumerio.

      Saludos.

  15. Daniel un pequeña aclaración, dices en el post » … Hay que subrayar que el artículo no menciona ni el tamaño ni la masa de este planeta … »
    Pero si te fijas, en el abstract dice: » … We find that the observed orbital alignment can be maintained by a distant eccentric planet with 10 Mass-Earth … »
    Y vuelve a repetir que esa es la masa de la simulación en los apartados 3, 4, 5.2, 6 y pié de la Figura 3.
    En efecto no afirma contundentemente que esa sea la masa, pero sí menciona el valor de 10 como orden de magnitud más probable.
    http://iopscience.iop.org/article/10.3847/0004-6256/151/2/22/pdf
    Gracias por divulgar Ciencia y Tecnología, saludos.

Deja un comentario

Por Daniel Marín, publicado el 20 enero, 2016
Categoría(s): Astronomía • Sistema Solar