Corea del Sur se convirtió en una potencia espacial a comienzos de este año con la puesta en órbita del STSAT-2C mediante un cohete Naro-1 (cuya primera etapa pertenece en realidad al Angará 1.1 ruso). Eso sí, el lanzamiento se produjo después de que sus hermanos y eternos rivales de Corea del Norte hicieran lo propio unas semanas antes. Pero Corea del Sur no quiere limitarse a lanzar pequeños satélites con su Naro-1 y tiene objetivos más ambiciosos. En concreto, la Luna.
De acuerdo con los planes de la agencia espacial surcoreana, KARI, se lanzaría primero un orbitador lunar de 550 kg que tardaría unos cinco días en llegar a nuestro satélite. La sonda cartografiaría la superficie lunar durante un año desde una órbita circular de cien kilómetros de altura, estudiando posibles zonas de alunizaje. Un segundo lanzamiento mandaría una sonda de aterrizaje -también de 550 kg- que incluiría un pequeño rover de 10-20 kg. La sonda de aterrizaje recuerda bastante al diseño de la Chang’e 3 china, aunque a menor escala. El rover podrá recorrer hasta 40 kilómetros de la superficie lunar y, aquí viene lo interesante, usará 500 gramos de estroncio-90 para mantenerlo operativo durante más de un mes, incluyendo las dos semanas de la noche lunar. No está claro si el estroncio se usará para generar electricidad en un RTG o, lo que es más probable, para mantener los sistemas a una temperatura adecuada durante la noche lunar. En este último caso serviría para hacer funcionar un RHU (Radioisotope Heater Unit), no un RTG. La elección de estroncio como isótopo para sus sondas es lógica teniendo en cuenta que Corea del Sur no tiene acceso a plutonio-238. Ambas sondas serían lanzadas por el futuro cohete Naro-2 (KSLV-2), de tres etapas.
En principio la primera sonda lunar debía haberse lanzado en 2025, pero la presidenta Park Geun-hye quiere acelerar el desarrollo del programa espacial del país, probablemente como respuesta a los desafíos cósmicos de sus vecinos norteños. Al fin y al cabo, es posible que Corea del Norte lance más satélites con su misil Unha-3, pero, con permiso del Líder Supremo, difícilmente será capaz de situar una sonda en órbita lunar. Según los planes que se barajan ahora, el orbitador lunar se lanzaría en 2020 y el primer alunizaje tendría lugar en 2025. Todavía no se ha decidido cómo se bautizarán las naves, pero estudios preliminares mencionan el nombre de Boreum, ‘luna llena’ en coreano. KARI afirma que intentará buscar algún tipo de colaboración de la NASA en estas misiones. El coste del programa lunar se estima que serán unos 650 millones de dólares.
Después de Japón, India y China, Corea del Sur podría convertirse en la cuarta potencia asiática en alcanzar la Luna. Y si logra llegar a la superficie sería la segunda en lograrlo tras China, que este mismo diciembre lanzará la Chang’e 3 (salvo que India se adelante con su Chandrayaan 2). ¿Estamos ante una mini-carrera lunar entre países asiáticos? Si es así, bienvenida sea.
Vídeo sobre el programa lunar de Corea del Sur:
[youtube]http://youtu.be/z2UU8B4_br8[/youtube]
Más info:
Excelente artículo como siempre. Muchas gracias!!!
Dani, para cuando la nueva bitácora del curiosity?!? Es para preocuparnos esto que le anda pasando? Me angustiaría mucho no verlo llegar a la cima del monte aeolis…
Saludos!!
Dentro de poco publicaré la siguiente Bitácora 🙂
Rezo para que lo consigan… Y que esa mini carrera lunar de paso a una mega carrera espacial a nivel mundial… Es soñar despierto, pero ojalá
Esta mini guerra fría entre las dos Coreas va a ser muy productiva para los geeks espaciales.
Gracias por esta interesante entrada.
Solo un pequeño comentario, se trata de la presidenta Park Geun-hye, no «el presidente»:
http://en.wikipedia.org/wiki/Park_Geun-hye
Saludos
Jeje, gracias por el aporte. Ahora lo cambio 😉
Me llama la atención la animación de la futura sonda surcoreana a la Luna. El espacio se ve siempre la Via Lactea, lo otro es que parece que el rover lunar podra poner una banderita de Corea del Sur en la superficie.
Muy buen artículo Daniel! Qué nos puedes contar de Ison? Saludos desde Uruguay!
ISON me da que no va a dar mucho de sí tras el perihelio…
no entiendo por que los países latinoamericanos (argentina,brasil, Chile y Venezuela no unimos efuresos para lanzar una misión como esta sobre todo argentina que tiene buena esperiensia en la construsion de satélites sobretodo que pronto lanzaremos nuestro primer satélite de comunicaciones el ARSAT 1.