El rover chino Yutu 2: tres años y más de un kilómetro en la cara oculta de la Luna

Por Daniel Marín, el 11 enero, 2022. Categoría(s): Astronáutica • Astronomía • China • Luna ✎ 154

La sonda china Chang’e 4 se convirtió el 3 de enero de 2019 en el primer artefacto humano que aterrizó suavemente en la cara oculta de la Luna. Unas doce horas después del alunizaje, la sonda desplegó el rover Yutu 2, que, lógicamente, también ha pasado a la historia por ser el primer vehículo en moverse por la cara oculta de nuestro satélite. Desde entonces han pasado tres años y, en este tiempo, el pequeño rover se ha ido desplazando, lenta, pero inexorablemente. Recientemente, Yutu 2 (玉兔二号, yùtù, ‘conejo de jade’ en mandarín) ha superado la marca de un kilómetro recorrido sobre la Luna durante el 38º día lunar de la misión (un día lunar equivale, obviamente, a un mes terrestre). En concreto, el 7 de enero de 2022 Yutu 2 alcanzó los 1003,9 metros. Sin duda, no es una cifra impresionante, sobre todo si la comparamos con los 10,5 kilómetros recorridos por el Lunojod 1 o los más de 40 kilómetros del Lunojod 2, pero no está nada mal para un pequeño rover de 140 kg que solo puede funcionar durante unos periodos concretos del día lunar (cuando el Sol no está demasiado bajo o alto en el horizonte para controlar que la temperatura de los sistemas no se salga de los parámetros del vehículo).

La sonda Chang’e 4 en el cráter Von Kármán vista por el rover Yutu 2 (CLEP/CNSA).

En cualquier caso, Yutu 2 ha sobrevivido tres años al inclemente medioambiente lunar —es muy complicado mantener operativa una nave espacial que debe permanecer 14 días terrestres seguidos en la gélida noche lunar—, un récord que seguramente va a mantener durante mucho tiempo, a pesar de la nueva oleada de sondas lunares planeadas para los próximos años (la mayoría de ellas no están diseñadas para soportar la noche). Durante estos 38 días lunares, Yutu 2 se ha alejado continuamente del lugar de aterrizaje de la Chang’e 4 para explorar el cráter Von Kármán y prosigue en dirección noroeste. En este tiempo se han publicado varios artículos con los resultados científicos de la misión y las imágenes del rover se han hecho virales en las redes en alguna que otra ocasión cuando ha descubierto algo «inusual» en la superficie lunar. Por ejemplo, en el 8º día lunar de la misión (del 26 de julio al 7 de agosto de 2019) se hicieron famosas unas imágenes del interior de un cráter en el que se apreciaba una sustancia parecida a un «gel». En realidad, el «gel» resultó ser un conjunto de fragmentos de roca de tipo brecha (breccia) con una extensión de 52 x 16 centímetros, similar a la que encontraron algunas misiones Apolo, esparcidos por el fondo de un cráter.

Panorama tomado por Yutu 2 en diciembre de 2021, durante el día lunar 35 de la misión. Se aprecian las huellas del rover (CNSA).
Panorama tomado durante el día lunar 35 de la misión (CNSA).
Mapa de la trayectoria recorrida por Yutu 2. La bandera roja marca el lugar del alunizaje de la Chang’e 4 (CNSA/Xinhua).
El «gel» descubierto por Yutu 2 en verano de 2019 dentro de un cráter, una roca de tipo breccia (CNSA).
Panorama en el que se aprecia el cráter anterior (CNSA).

En el día lunar 26, a principios del año pasado, Yutu 2 se encontró con una roca inusual con una forma puntiaguda, que sería bautizada apropiadamente como «hito» o «mojón» (里程碑). Tras ser analizada por las cámaras y el instrumento VNIS del rover, los investigadores concluyeron que probablemente se trataba de una roca joven que llegó allí al romperse una roca más grande como resultado de un impacto no hace mucho en términos geológicos. Entre junio y septiembre de 2021 —los días lunares 31 y 34—, Yutu 2 pasó por una serie de siete cráteres situados en terreno elevado que fueron bautizados por el control de misión como el «dios tortuga» (神龟). Más recientemente, Yutu 2 observó una roca en el borde de un cráter que, no se sabe muy bien por qué, fue interpretada en las redes como un «objeto extraño» de gran tamaño, de ahí que la apodasen la «cabaña misteriosa (神秘小屋 )». Dejando a un lado las interpretaciones más calenturientas de las imágenes —al principio, apenas un puñado de píxeles—, lo cierto es que, una vez más, el horizonte lunar, mucho más cercano y nítido que el terrestre, jugó una mala pasada a los observadores menos experimentados. Durante este 38º día lunar de la misión, Yutu 2 se ha acercado un poco más a su objetivo y ha verificado que, efectivamente, se trata de una simple roca (aunque, eso sí, con una forma que a muchos les ha recordado a la de un conejo, lo que no deja de ser un guiño al nombre del propio rover).

La roca puntiaguda «hito» vista por Yutu 2 el día lunar 26 (CNSA).
Detalle de la roca (CNSA).
La roca con las huellas de Yutu 2 tras explorarla de cerca (CNSA).
Foto del horizonte en el que se aprecia la roca apodada «cabaña misteriosa» (CNSA).
En enero de 2022 Yutu 2 se acercó a la «cabaña» y comprobó que era una roca (CASC).

Desde un punto más formal, Yutu 2 también ha sido noticia últimamente gracias a un artículo publicado en Nature Astronomy en el que el equipo del rover cree haber encontrado fragmentos de un meteorito del tipo condrita carbonácea dentro y alrededor del pequeño cráter que formó cuando chocó contra la superficie lunar hace un millón de años aproximadamente. De confirmarse este descubrimiento, esto significaría que se pueden encontrar fácilmente sustancias orgánicas relativamente ricas en volátiles —incluyendo agua— en la superficie lunar (agua que, vale la pena subrayar, no serviría como recurso para una misión tripulada, pero sí que podría ayudar a explicar de dónde vienen parte de las reservas de este compuesto que se pueden observar hoy en día en la Luna). Como no podía ser de otra forma, los fragmentos de meteorito han sido denominados «alienígenas» en las redes chinas. Ya se habían detectado pequeños trozos de condritas carbonáceas en el interior de rocas recogidas por las misiones Apolo, pero esta es la primera vez que se han descubierto directamente en la superficie mediante el uso de instrumentos remotos.

Datos de Yutu 2 que han permitido identificar restos de un meteorito de tipo condrita carbonácea en la Luna (CNSA/Nature Astronomy).
Paisaje de Yutu 2 tomado en el día lunar de la misión 21 (CNSA).
Yutu 2 capta su sombra durante el día lunar 27 (CNSA).
Algunas de las «conductoras» de Yutu 2 (CNSA).
Una de las «conductoras» de Yutu 2 en el centro de control de la misión en Pekín (CNSA).

Es necesario recalcar que la aventura de Yutu 2 no sería posible sin el satélite Queqiao, encargado de retransmitir los datos de Yutu 2 y Chang’e 4 desde la cara oculta de la Luna hasta la Tierra. Queqiao (鹊桥号中继卫星, ‘puente de urracas’ en mandarín), fue lanzado el 21 de mayo de 2018 y es el primer satélite situado en el punto L2 del sistema Tierra-Luna (EML2, no confundir con el punto L2 del sistema Tierra-Sol), así como el primer satélite usado casi exclusivamente para tareas de comunicaciones que no está en órbita de la Tierra. Desde mayo de 2019, Queqiao retransmite directamente los datos de Yutu 2 a nuestro planeta. Para mantenerse en el punto L2, Queqiao debe ajustar su órbita regularmente utilizando sus propulsores. Tras el éxito de las recientes misiones Chang’e 4 y 5, China ha confirmado que enviará las sondas Chang’e 6, 7 y 8 —que constituyen la cuarta fase del programa de exploración lunar chino (CLEP)— al polo sur de la Luna. Primero se lanzará la sonda Chang’e 7, que incluirá elementos de las misiones Chang’e 3 y 4, así como de la Chang’e 5, y, posteriormente se lanzará la Chang’e 6, similar a la Chang’e 5, con el objetivo de traer muestras de la cara oculta de la Luna. Finalmente, la Chang’e 8 debe ser uno de los primeros elementos de la base lunar automática ILRS que China y Rusia quieren construir en el polo sur de nuestro satélite. Pero mientras, todo indica que a Yutu 2 le queda mucho por delante. Las aventuras del conejito de jade no han terminado todavía.

La Tierra (derecha) y la Luna vistas desde el satélite Queqiao en el punto L2 del sistema Tierra-Luna (CNSA).
Satélite Queqiao (Xinhua).
La sonda Chang’e 4 (derecha) y Yutu 2 vistos en una imagen de la LRO de la NASA (NASA).
Yutu 2 graba su sombra en el día lunar 22 (CNSA).

Referencias:

  • http://www.chinanews.com.cn/gn/2022/01-07/9646793.shtml
  • http://www.news.cn/2022-01/07/c_1128243103.htm
  • http://www.chinanews.com.cn/gn/2021/12-01/9619811.shtml
  • https://www.chinanews.com.cn/gn/2021/05-21/9482860.shtml
  • https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0012821X20303228
  • https://www.nature.com/articles/s41550-021-01530-w
  • https://www.chinadaily.com.cn/a/202112/08/WS61b00da8a310cdd39bc7a058.html


154 Comentarios

    1. Lo comentaron hace un par de días. Se han quedado atascadas unas piedrecitas en el aparato que toma las muestras. Supongo que lo arreglarán, quizá con sacudidas o golpecitos, pero se lo pensarán un tiempo para no causar daños.

  1. Fuera del tema:
    El derretimiento del permafrost en las zonas árticas por el calentamiento global está destruyendo ciudades enteras, miles de km de carreteras, tierras que se convierten en lagos, etc. Al mismo tiempo libera grandes cantidades de gases de efecto invernadero que realimentan el calentamiento global.
    https://www.bbc.com/news/science-environment-59915697

    ¿Podría haber permafrost también en la Luna? Quizá bajo el suelo resecado por la radiación y por la falta de presión haya gran cantidad de hielo ¿no?

    1. Hay terreno con capas o crosta de hielo, pero por ahora no se han visto indicios superficiales de restos orgánicos, de vida, o su descomposición que produciría esa fuente de metano.

    2. En Marte sí que puntualmente hay liberación de metano a lo grande (si no me confundo y era CO2?)
      Pero el orígen a veces puede ser geológico, no de vida. Supongo que hay o hubo incertidumbre de su orígen, y mucha curiosidad.
      Si la Luna y la Tierra se formaron de un choque, por ahora no hay indicios de vida hasta mucho después. Pero quién sabe! 🙂

      1. No me refería a que pudiera haber vida, ni siquiera metano, bajo el suelo de la Luna, sino permafrost. O sea, suelo impregnado de agua congelada permanentemente.

        En Marte lo que parece haberse detectado es liberación de metano. De CO2 ya se sabe que hay mucho, porque es el principal componente de su atmósfera.

        Pienso que por muy caótica que fuese la formación de la Luna no pudo dejar de atrapar algo de hidrógeno, el elemento más abundante del universo, y que, como su nombre indica, genera agua. Así que debería de haber agua en el interior de la Luna, que podría surgir lentamente por flotación, al tener menos densidad que la roca, y en forma de hielo.

        1. Claro, es interesante, aunque sea sin vida.
          Pues parece que sí hay agua ‘endógena’, no sólo de meteoritos (según wikipedia, buscando Luna:
          ‘… Chandrayaan-1 (…), ha encontrado evidencias de una importante cantidad de agua endógena (no procedente de otros astros) por debajo de la superficie de la Luna, tal agua sería en gran parte producto de las reacciones químicas desencadenadas por las fuertes radiaciones…’ del hidrógeno como comentas.

          O en ‘Agua lunar’ dice
          ‘… tiene agua en todo tipo de lugares, no sólo encerrados en minerales, sino dispersos por toda la superficie rota y, potencialmente, en bloques o láminas de hielo a profundidad…’

          1. Encantado, curioseando wikipedia he aprendido, pero ahora dudo más… Porque creo que hace poco en la prensa decían que había poca concentración en su suelo superficial.
            Supongo que me encantaría saber de un lago subterraneo de agua en la Luna, y con estalactitas o bichos, tipo Fraggle Rock 😉

    3. Lo he mirado ahora en wikioedia, y parece que sí.
      Lo apunto, por si puede servir a otra gente:

      -Hielo lunar (ir a apartado de ‘Agua en la Luna’)
      https://es.wikipedia.org/wiki/Luna
      Parece que sí que hay mucho suelo congelado!

      -La teoría de un choque que formaría la Luna y la Tierra (mucho antes que los indicios de vida)
      https://es.wikipedia.org/wiki/Teoria_del_gran_impacto

      -Metano en Marte (ir a apartado de Metano en la atmósfera)
      https://es.wikipedia.org/wiki/Vida_en_Marte

  2. Siempre me ha llamado la atención los nombres que utilizan para designar las misiones; quizás porque desde nuestro punto de vista occidental sabemos perfectamente quien es Apolo; pero quien o que era Chang’e, Yutu, etc, lo ignoramos totalmente.
    Como ejemplo la leyenda de Zhinu y Niulang, donde, en el séptimo día del séptimo mes del calendario lunar chino, un puente de urracas permite a los dos amantes reunirse brevemente entre las estrellas; de ahí lo de Queqiao.

    1. Creo que esta leyenda en concreto es relativamente conocida en Occidente gracias al festival Tanabata japonés, versión nipona del Qixi chino que aparece en muchas películas y obras de manga/anime del país del sol naciente.

  3. Fuera del tema:

    Comprueban mediante datos de Gaia que el Sol está pasando, desde hace 5 millones de años, por en medio de una burbuja de la galaxia, de unos 1000 años luz de ancho, casi vacía de gas, en cuyos bordes se forman estrellas nuevas.
    https://phys.org/news/2022-01-light-year-wide-earth-source-nearby.html

    Se sospecha que la burbuja se formó hace unos 14 millones de años por la explosión de varias supernovas. ¡Menos mal que en ese momento el Sol no estaba ahí! ¿Si hubiera estado, se hubiera producido una gran extinción?
    ¿Puede que la ausencia de señales de vida inteligente se deba a que estemos atravesando un desierto provocado por aquellas explosiones?

    1. Lo vi en otro medio, es increible!
      O nos englobó en una explosión hace 5Ma? Supongo que produciría mucha radiación y rayos.
      No muy lejos de esas fechas mutó o se seleccionó un Homo pelado, capaz de engordar con patatas, cereales, legumbres…

      1. Según entiendo, fue el Sol el que se metió en la burbuja en su camino por la galaxia:
        «But about five million years ago, the Sun’s path through the galaxy took it right into the bubble»

        ¿Para qué queremos hacer naves interestelares, si el Sol ya nos transporta gratis?🙂

        1. Tu enlace se ve bonito, y el video, wow! Gracias!
          Es como dices, cierto, con el asombro o humor, yo lo había dicho mal.
          Debió explotar lejos, sin afectar, pero vaya mega explosiones!
          Y sí, esto de desplazarse tanto con el Sol parece como viajar con una supernave, mientras cocinamos pizza 😉

  4. Me alegra un montón que haya rovers en la Luna, en Marte…. y de todas las banderas.
    Pero hay algo que siempre me ha resultado exasperante: su lentitud.

    Se podría decir que, (los pobres), tienen que tomar una imagen del suelo delante de ellos, procesarla, identificar obstáculos, decidir el camino, activar motores, poner una ramita de perejil a San Pancracio, etc, etc… Pero aquí en la vieja Tierra, ya tenemos robots autónomos que hacen eso a muchísima mas velocidad, y no son maquinas artesanales supermegaturbocarísimas de la NASA.

    https://www.enriquedans.com/wp-content/uploads/2020/02/Spot-Boston-Dynamics-1280×720.jpg

    Si…. ya sé que la radiación fríe los procesadores de los robers y que se necesitan unos muy especiales que puedan soportar esas condiciones… pero se pone un núcleo de cuatro o cinco de esos y ya podemos subir algo más ágil y de mayor potencia de procesamiento. Mi móvil tiene cuatro núcleos y no es de los caros.

    No sé… igual me faltan datos para entenderlo, pero no veo tan difícil, mejorar las prestaciones de unas máquinas que hacen una labor tan importante.

  5. Según el resultado de unas simulaciones informáticas, los vientos verticales podrían elevar bacterias hasta 120 km de altura.
    https://phys.org/news/2022-01-vertical-bacteria-altitude-120km.html

    O sea que, suponiendo que esto ocurra en el mundo real, esos humildes microbios ya habrían llegado más alto que Jeff Bezos con todo su poder.

    A esa altura, donde la atmósfera es casi nula, el polvo interplanetario podría entrar en contacto con las bacterias y transportarlas entre mundos, y quizá así sembrar la vida fuera de la Tierra.

    ¿Encontraremos restos de bacterias terrestres en la Luna?

    ¿Habrá algún modo de imitar ese modo de transporte para elevar astronaves, por ejemplo mediante globos superlivianos que ofrezcan mucha superficie al viento vertical?

  6. Compis, una pregunta off topic que se me ha ocurrido al vuelo.

    Tengo ententido que un motor cohete CON LA MISMA TOBERA (o sea, sin cambiar entre tobera atmosférica ni espacial, y sin aerospikes de por medio) produce más empuje en el vacío que en la atmósfera (¿quizá también por no haber resistencia aerodinámica?).

    Pero, y aunque es 800 veces más densa, tengo la duda de si en el agua, el mismo motor produciría más o menos impulso que en la atmósfera o en el vacío. En principio, el agua ofrece mucha más resistencia al avance, pero la expansión de gases de escape en el agua también produciría más presión, comprimiendo el chorro de escape, además de vaporizar parte de ella en la llama de combustión creando gas extra.

    El ver este vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=czwBWB5u6Hg&ab_channel=WarpedPerception es lo que me hace dudar un poco.

    ¿Alguien podría calcular eso o sabría si es más o menos eficiente el MISMO motor en el agua que en el vacío? Intuyo que en el agua, peor… pero no lo tengo muy claro por lo comentado antes.

    Gracias!!

  7. Comentario para Noel:

    Me han parecido muy interesantes tus sugerencias sobre por qué aprender a mover asteroides y me gustaria comentarlas y añadir alguna de mi cosecha.

    «– Modificar la órbita de asteroides para usarlos como auténticas naves, vaciando su interior y haciéndolos rotar a lo «Rama».».

    A mí el concepto de variar la rotación de un asteroide para obtener gravedad artificial me parece fascinante pero el asunto no esta exento de dificultades.
    Por lo poco que sé de mecánica celeste una parte importante de los asteroides de más de 1 kilometro de diametro del sistema solar rota sobre su eje 1 vez cada 10-12 horas y para obtener 1g artificial (en la parte interna del asteroide) este debería rotar aproximadamente 1 vez por minuto,es decir,unas 600-700 veces más rápido en este caso. Por lo que la aceleración a proporcionar al asteroide es bastante considerable, sin olvidar que esta debe ser lineal y progresiva para evitar que salga material eyectado de la superficie del asteroide al contar este con muy poca gravedad. Pero aún así me parece viable.

    En este aspecto me surge una duda:

    Imaginemos por un momento que hemos logrado acelerar el asteroide como teniamos planeado y todo a salido a la perfección.
    ¿Nos seria más difícil acoplar nuestras naves al asteroide ahora con esta alta velocidad de rotación?.

    Por otra parte: ¿No se podría utilizar este concepto en vez de con un asteroide con una luna de Marte?.

    Phobos y Deimos sufren acoplamiento de marea por lo que muestran siempre la misma cara a Marte al igual que ocurre con la Luna y la Tierra. Pero:
    ¿No podria una luna marciana girar sobre su propio eje y a la vez mantener la misma cara apuntando al planeta rojo?.
    Quiero decir que en este caso la luna no rotaria en el mismo eje que Marte sino que lo haria con un eje inclinado 90º respecto a este, es decir, la zona de la luna más próxima a Marte equivaldria al polo y la «zona del terminador» equivaldria al ecuador. Bueno no sé si mé he explicado con claridad.

    Por otro lado:

    «– Usar varios miles de ellos para acelerar la rotación de Venus, en impactos cronometrados y perfectamente sincronizados.»

    El concepto de terraformar planetas sin necesidad de poner un pie en ellos me parece alucinante y a este respecto yo también tengo una sugerencia «alocada» que en principio valdria para Venus y especialmente para Marte.
    En en caso de Marte seria tan «sencillo» como capturar miles de asteroides y depositarlos suavemente en la superficie de Phobos y Deimos (incluso fusionando ambos) aumentando su tamaño y su masa hasta tal punto que calienten el nucleo de Marte y hagan revivir al planeta y su magnetosfera.
    En este aspecto la masa conjunta de ambas lunas equivaldria aproximadamente a 1 milesima parte de la masa de nuestra Luna, pero teniendo en cuenta que la masa de Marte es solo un 11% de la tierra, para que su luna modificada tuviera una proporción igual a la de la Tierra-Luna su masa «solo» deberia crecer 100 veces aproximadamente.

    En cuanto al caso de Venus se podria crear tambien una luna artificial másiva que obligue a acelerar su rotación.

    Un saludo

    1. Hola, Raúl!

      Lo de usar los asteroides como naves, es de la serie de novelas de «Marte Rojo/Azul/Verde» y «2312» de Kim Stanley Robinson (sobre todo, de esta última, que es un poco «pastel», todo hay que decirlo).

      No es mala idea en absoluto, porque «solo» (!!!!) tienes que vaciar el asteroide, no construirlo. En cuanto a lo de la rotación, no hay que encajonarse en el objetivo de 1G. Para según qué duraciones de vuelo (pocos meses, hasta un año), con una gravedad de 0’3 a 0’5 G basta y sobra para mitigar casi por completo los problemas de la microgravedad de otros tipos de naves/estaciones, por ejemplo, la ISS. Para vuelos de menos de dos/tres meses, casi que ni vale la pena preocuparse, el deterioro será muy modesto, y más con ejercicios regulares.

      Si se buscan gravedades artificiales de 0’8/1G, hay diversos grandes asteroides de varios km que permitirían conseguirlo, incluso entre los NEO. No hablo de Ceres, Psyche o Vesta, claro, pero sí por ejemplo, de Eros (8.6km), Taranis (3.6km) o Don Quijote (18.7km), asteroides del Grupo Amor, con órbitas que pasan cerca de la Tierra, Marte y Júpiter. También de miembros del Grupo Apolo, con 250 de ellos por encima de 1km, como el mayor de ellos, Sísifo (10km) o Geógrafo (5’1 x 1’8km) [Wikipedia]. Vamos, que hay dónde escoger.

      El «rollo» está en la composición del asteroide. Si es metálico o condrítico, son muy sólidos y permitirían la rotación (a lo mejor hace falta algún refuerzo estructural, por si las grietas y demás). Si son como Bennu o Ryugu, o sea, pilas de escombros, pues nada que hacer, porque se disgregarían a la mínima.

      ————–

      En lo relativo al acople de naves, pues no le veo problema: el puerto de acople en el eje de giro, en forma de cilindro. La nave entra mientras el asteroide rota a su alrededor, y se desembarca (carga o personas) en un anillo estático. Una vez finalizadas las operaciones, el anillo entra en rotación e iguala la del resto del asteroide.

      ————-

      Usar Fobos y Deimos como estaciones también sale en las novelas que comenté antes. Tampoco es mala idea, y si los haces rotar sobre el eje perpendicular a la superficie de Marte, pues ningún problema en principio (siempre y cuando no haya algún Efecto Yarckovsky que la líe, jajaja).

      =================

      Lo de bombardear con una serie de asteroides Venus para acelerar su rotación es algo que llevo leyendo décadas (sí, también en esas novelas, jajaja). Venus es tan grande como la Tierra, por lo que «construir» una luna masiva para acelerarlo implica usar una luna de las dimensiones de la nuestra. De todos modos, las lunas tienden a FRENAR a sus mundos, mediante el acoplamiento. En cambio, bombardear quirúrgicamente un punto concreto y en un ángulo concreto la corteza planetaria sí que podría modificar el momento del planeta e incrementar su rotación. Tampoco hace falta poner a Venus en 24 horas. Se calcula que con un ciclo de 100 horas, bastaría y sobraría (en contraposición a los 243 DÍAS que tarda ahora).

      Lo mismo para Marte. Una luna masiva podría incrementar su calor de marea, pero creo que necesitarías algo del tamaño de entre Encélado (550 km) y Ceres (980 km). Ten en cuenta que el calor de marea de la Luna en la Tierra solo aporta alrededor del 5-7% (tengo entendido) del total, siendo casi todo debido a la desintegración radiactiva de isótopos. Claro que, por otro lado, una luna suficientemente cercana a Marte (en la órbita de Deimos, por ejemplo) no tendría que ser tan grande, y, con un periodo tan corto (unas 30 horas), generaría bastante calor (y más, si se hace un poco excéntrica la órbita). Generaría aún más calor en la órbita de Fobos, pero está tan cerca del planeta (casi 9.400 km) que no sé yo si un cuerpo masivo tan cerca podría acabar cayendo al planeta, o desintegrarse por quedar dentro del Límite de Roche para ambos cuerpos… Es complicado (y fuera de mis capacidades de cálculo, jajaja).

      1. Quizás también se aceleraría un poquito la rotación de Venus…
        Precipitando su atmósfera más densa? (la masa del planeta tendria menor radio, tal como hace giros un bailarín patinador agdupándose)
        Pero ni idea de cómo se podria precipitar, quizás tapando el Sol… 😉

      2. Me parece a mí que la fracción de masa que representa la atmósfera de Venus respecto de la masa total del planeta, es poco menos que insignificante. Igualmente, el grosor de la atmósfera respecto del radio total de Venus también es igual de insignificante. Quizá, «precipitando» el 90% de su atmósfera lograrías aumentar la rotación en poco más de uno o dos minutos (hablo a bulto), si es que llega.

        Un parasol gigante en L1 Venus-Sol (algo muy fino pero extenso, de unos 20.000 km de diámetro, pero solo unos milímetros de grosor… y habría que estudiar cómo mantenerlo estable contra la presión de la luz solar a esa distancia) bastaría para refrigerar el planeta en poco tiempo (unos años). La mayoría del CO2 y casi todo el ácido sulfúrico precipitaría, pero habría que fijarlo, porque al volver a abrir el paso a la luz para tener un ciclo de iluminación razonable, se liberaría de nuevo.

      3. Gracias por responder Noel.

        Asi que «tus sugerencias» no son del todo tuyas sino inspiradas en relatos de ciencia ficción, pues esta bien saberlo.
        Yo por mí parte no me he leido ninguna de las novelas que has citado, de echo acabo de empezar a leer mí primera novela de ciencia ficción Fundación de Isaac Asimov (basicamente porque era lo que habia disponible en la biblioteca pública) aunque en un principio iba buscando la trilogia de Marte «Rojo/Azul/Verde» de Kim Stanley Robinson.

        1. Algunas, sí. Otras son cosecha propia.

          De todos modos, en la Ciencia Ficción prácticamente se ha hablado, directamente o de pasada, de casi cualquier cosa que se te pueda ocurrir… así que es bastante probable que alguna idea «tuya» ya haya sido «ideada» antes por alguien, jajajaja.

          Lo de mover asteroides con fines diversos, es algo recurrente en muchos escritos Sci-fi, así que poco se podrá innovar al respecto (las posibilidades tampoco son ilimitadas), aunque lo que se te ocurra en el momento no lo hayas leído antes.

          1. Gracias por la recomendación LuiGal. La verdad es que llevo leidos más menos 1/3 del libro y no me esta apasionando demasiado espero como comentas que la segunda parte de la trilogia me enganche más.
            Un saludo

        2. Por si te interesa, tengo un enlace de MEGA con 3.6 Gb de literatura, entre ella muchísima novela de Sci-Fi (Asimov, Stanley Robinson, A.C. Clarke, Phillip K. Dick, Orson Scott Card, Terry Pratchet… y muchos más), además de libros específicos de Sagan, Hawking, Asimov (también), etc…

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        3. Eso sí:

          Están mayoritariamente en formato EPUB (que es el del libro electrónico que tengo), y algunos en PDF. Pero hay aplicaciones para poder leer cualquier formato en el PC o el móvil, así que tampoco es un gran problema.

          1. A pesar de que la tecnologia informática y yo no nos llevamos muy bien y que no tengo ni nunca he utilizado un libro electronico estoy interesado.
            ¿Como lo hacemos?.

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