Adiós a Michael Collins

Por Daniel Marín, el 29 abril, 2021. Categoría(s): Apolo • Astronáutica • Luna • NASA ✎ 32

Se nos ha ido uno de los principales protagonistas de la historia de la era espacial. Michael Collins nos ha dejado hoy día 28 de abril a los 90 años de edad. Como todos sabemos, Collins pasó a la historia por ser miembro de la tripulación del Apolo 11, aunque no llegó a pisar la Luna. Collins, que se haría famoso como piloto del módulo lunar (CMP) del Apolo 11, entró en la NASA en 1963 como parte del tercer grupo de astronautas seleccionados por la agencia espacial. Participó en la misión Gémini 10 en julio de 1966 junto con John Young, realizando dos paseos espaciales. Esta experiencia le colocó entre el selecto grupo de astronautas que susceptibles de ser elegidos para las primeras misiones Apolo. En un principio fue asignado como piloto del módulo lunar a la segunda misión tripulada del programa Apolo con Frank Borman y Tom Stafford, pero esta misión sería cancelada tras la tragedia del Apolo 1. A raíz del accidente, fue nombrado piloto del módulo de mando en la misión Apolo 9 junto con Borman y Bill Anders. Sin embargo, las tripulaciones del Apolo 8 y el Apolo 9 se intercambiaron cuando Jim McDivitt rechazó volar alrededor de la Luna y prefirió esperar a que el módulo lunar estuviese listo.

Michael Collins durante su entrenamiento para el Apolo 11 (NASA).

Collins podía haberse convertido junto con Borman y Anders en uno de los tres primeros seres humanos en salir de la órbita baja y orbitar la Luna durante la misión Apolo 8, pero tuvo que pasar por el quirófano para corregir una hernia de disco en la columna y sería sustituido por Jim Lovell, que hasta ese momento se estaba entrenando como piloto del módulo de mando para el Apolo 11. Cuando se recuperó de la cirugía, volvió a ocupar su puesto en la tripulación del Apolo 11. El 16 de julio de 1969, Collins se dirigió a la rampa 39A del Centro Espacial Kennedy, junto con Neil Armstrong y Buzz Aldrin, llevando una bolsa de papel marrón en cuyo interior iba una pequeña trucha minúscula presentada en una tabla de madera como si fuera un trofeo de pesca, una broma dirigida al pad leader Günter Wendt. Momentos después, despegaba a bordo del cuarto Saturno V tripulado (curiosamente, y a pesar de ser el CMP, lo hizo en el asiento derecho de la cápsula). El resto es historia.

La tripulación del Apolo 11 (NASA).

Durante el Apolo 11 Collins jugó para los medios el papel de «pobre astronauta». Mientras sus compañeros pisaban la Luna y entraban en la historia por la puerta grande, Collins flotaba solo a bordo del módulo de mando Columbia. Llegó a ser denominado el ser humano más aislado de la historia, aunque previamente John Young también había orbitado la Luna en solitario durante la misión Apolo 10 (si bien es cierto que Collins estuvo más aislado mientras pasaba por la cara oculta). A Collins le hubiese gustado pisar la Luna, sin duda, pero, como el resto de astronautas que ocuparon el puesto de piloto del módulo de mando en el Apolo, era plenamente consciente de la enorme suerte que tenía por haber estado en el momento y en el lugar adecuados. Lógicamente, nunca se quejó.

Collins durante el entrenamiento para el Gémini 10 (NASA).

Frente al frío Armstrong y al seco Aldrin, Collins había sido una sorpresa para los medios. Aunque reservado, su humor inteligente, su afición por dar referencias cultas y su gusto por la poesía lo alejaban del tópico del astronauta práctico y viril. Tras el Apolo 11, Deke Slayton le ofreció la posibilidad de ser comandante de reserva de la misión Apolo 14, lo que le hubiera permitido, con suerte, ser el comandante del Apolo 17 y, por tanto, pisar la Luna. Pero Collins declinó la oferta de Slayton y decidió dejar la NASA en 1970 para trabajar en el Departamento de Estado. Luego ocupó el cargo de director del Museo del Aire y el Espacio hasta 1978, para terminar jubilándose en 1982. Collins alcanzó en 1976 el rango de mayor general de las fuerzas aéreas de EE.UU. Dos años antes publicó su autobiografía, Carrying the Fire, en la hizo gala de sus dotes como escritor. No en vano, probablemente sea la mejor autobiografía de un astronauta del Apolo que se haya publicado. Más adelante publicaría otros libros sobre el espacio: Liftoff (1988) y Mission to Mars (1990).

Collins junto con Bill Anders (izqda.) y Frank Borman (NASA).

Cuando Collins nació en 1930, los viajes a la Luna eran simple fantasía. Pero, con 38 años, Michael Collins logró participar en una de las mayores aventuras de la humanidad. Puede que no pisase la Luna, pero su nombre, grabado en la placa que llevaba la etapa de descenso del módulo lunar Eagle, permanecerá durante millones de años en nuestro satélite.

Hasta siempre, Mike.

La placa del módulo lunar del Apolo 11 en la Luna, con el nombre de Collins en medio (NASA).



32 Comentarios

  1. Gracias nuevamente por esa entrada al blog Daniel; esta vez siendo tan sentida por todos, recordando a ese enorme astronauta y ser humano.

    Gracias amigo.

  2. A diferencia de las otras misiones Apollo el 8 y, sobre todo, el 11 tuvieron una enorme repercusión y han mantenido ese estatus hasta hoy, muy por encima del resto. Lo mismo pasa con Armstrong con respecto de Aldrin y Collins.
    Hemos de aceptar que en la historia pesarán siempre más los primeros y que Aldrin siempre será el «segundo» y Collins el que no pisó la Luna.
    Eso no les quita ningún mérito, al contrario, para mi son, si cabe, todavía más dignos de admiración.
    Collins en particular la merece por su personalidad culta y amable, su enorme valía profesional y su trayectoria vital.
    Como en las películas en que el amigo del protagonista se sacrifica para salvarle, Collins dijo que el alunizaje hubiera fallado, él habría hecho todo lo posible y vuelto solo a la Tierra, sabiendo que estaría marcado para siempre por la desgracia.
    Su autobiografía es, sin duda, un libro imprescindible para cualquier espacio-trastornado, lástima que solo se haya publicado en español en Argentina en 1977 (El portador del fuego) y no sea fácil conseguirlo, a ver si ahora se animan a reeditarlo o sacarlo en soporte digital

    1. Por cierto Daniel, Buzz Aldrin (90) parece estar en buena forma, (y bastantes de los otros Apollo’s que todavía andan vivimos y coleando) pero como hacen los periódicos, mejor ir teniendo la bio preparada…
      De las misiones Apollo todavía viven:
      7-Walter Cunningham (90)
      8-Frank Bormann (93) Jum Lowell (92) y Bill Anders (87)
      9-James McDivitt(91) David Scott (87) y Russell Schweickart (85)
      10-Thomas P. Stafford (90)
      11-@TheRealBuzz (90)
      16-Thomas K. Mattingly II (85) y Charles M. Duke (85)
      17-Harrison Schmitt (85)
      No perdamos la memoria de todas estas excepcionales personas, que fueron capaces de llegar al espacio a hombros del casi medio millón de extraordinarios héroes que trabajaron en tierra.

      1. O los eligieron muy bien o el espacio no fue tan letal como lo pintan !

        Collins “tu que ye, taxista?” Frase de un famoso monólogo cómico que le ha hecho famoso entre muchos que no lo conocían. Un gran hombre.

        DEP

      1. Gracias por el aporte carlangas.

        Estoy disfrutando con su lectura puesto que aprecio q debajo de ese duro piloto de pruebas ( alguien aquí ha mencionado q tenían q tenerlos bien grandes para colocarse en la punta de un petardo gigantesco.. pues si) hay una persona con gran sensibilidad, al contrario que me paso con lectura de biografía de Armstrong (el primer hombre de Hansen) que la encontré un tanto fría (no sé si en consonancia con carácter q parecía desprender) …

        Si alguien pudiera recomendarme alguna biografía mas, ¿quizás de algún cosmonauta Ruso Daniel..?

  3. Gracias daniel por esta dedicatoria. Ahora esta con sus compañeros en el infinito. Creo que fue un hombre humilde.

    No sabia lo de que podía haber sido comandante del apolo 17, curioso que dijera que no, otros hubieran hecho lo indecible por ir, hasta en eso era genial. Cuantas carambolas en las tripulaciones pasando de una a otra por circunstancias.

    Ad Astra Michael Collins

  4. Qué tristeza que estos pioneros nos dejen sin llegar a ver a sus sucesores. Ya sólo nos quedan 10 personas que han visto la Tierra flotando al asomarse a la ventana.
    Ad astra, Michael Collins.

    1. Toda la razón tomassino toda la razón, ellos serán recordados 1000 o 2000 años después de su muerte cual faraón, nosotros no lo creo.

      saludos jorge m.g.

  5. Si hay algo que siempre me asombra del Apolo 11 es que fue la 21ª misión tripulada al espacio de EE. UU. Si uno piensa en la cantidad de aviones que volaron desde el hito de los Wright en 1903 hasta que se logró cruzar el Atlántico por primera vez y lo compara con haber ido al espacio veinte veces y ya a la siguiente pisar la Luna nos habla de un salto tecnológico difícil de aprehender incluso en este momento.

  6. ‘Tempus fugit’…

    Y en esa corriente imparable se nos van, poco a poco, los valerosos pioneros de aquella intensa década que nos vio nacer a algunos… De pequeño veía a estos tres astronautas como unos ‘señores’ parecidos a mi padre, que es de esa quinta. Su marcha me hace sentir un poco más mayor, casi ‘viejo’…

    DEP

  7. Gracias Daniel por rendir este tributo a uno de los hombres que mejor representa ese espíritu tenaz del ser humano por siempre buscar nuevos horizontes que nos eleven más cerca de las estrellas. Paz a sus restos

  8. Él mismo contó en «Carrying the Fire». No fue el hombre más solitario del mundo -como lo bautizó la prensa- sino que sintió «awareness, anticipation, satisfaction, confidence, almost exultation».

    «I am it. If a count were taken, the score would be three billion plus two over on the other side of the moon, and one plus God only knows what on this side»

    No le gustaba que le dijeran «héroe». Decía que hacer bien su trabajo no conllevaba mayor mérito. Un tipo humilde que se codeó con el infinito.

  9. Una tristeza me embarga por la perdida de una legenda de la era espacial ojalá que si el hombre vuelve a la luna ya sea con EEUU o china sean homenajeados como es debido 😔
    OT : volvió a volar el Vega esta ves sin incidentes y todo listo para el lanzamiento de la estación espacial china y el salto del SN 15 de spacex

  10. Gracias Daniel. Un magnífico relato, como siempre señalando lo más notable y alguna anécdota interesante.

    Me ha gustado enormemente la foto del ABC de la exploración lunar rodeando la misma Luna.

    Collins contempla desde el otro lado y desde lo más alto a los que serían los primeros bípedos lunares, sus compañeros de misión cumplida. Que gran misión!

    Un saludo Cislunar !

  11. Sin palabras. Poco a poco se van yendo los más valientes (porque había que tener dos huevos como el Emma Maersk de gordos, para poner el culo sobre 2.900 tm de combustible en el cohete más poderoso de la historia y lanzarse a 400.000 km dentro de una lata forrada de papel de alumino), y sólo nos queda el recuerdo.

    AD ASTRA CMP COLLINS.

    P.D.: ¿no está un poco sobrevalorada la peligrosidad de la radiación en el espacio? Porque, ahí arriba, hay un post en el que, los que quedan, pasan bastante cómodamente de los 80 años (muchos con 90, como Collins) y no parecen estar mucho más «cascaos» que los que nos hemos quedado toda la vida confortablemente en la Madre Tierra…

    1. Como pillen una tormenta solar de camino a la luna o regresando y ya no podrán decir lo mismo, las misiones apolo tuvieron mucha suerte

      1. Es una posibilidad, cierto. Pero también sería mucha casualidad que JUSTO en esos días, JUSTO en el tránsito, cuando no se puede «esconder» la nave temporalmente tras la sombra de la Luna, ocurriese una tormenta solar JUSTO en la dirección de la Tierra (de todos los ángulos posibles para que ocurra un evento de éstos).

        No es una posibilidad despreciable en absoluto, pero tampoco es que sea algo que tenga que ocurrir sí o sí. Además, y si no me equivoco (que es posible que sí), creo que el Sol estaba en un ciclo de mínimo solar en los tres años del Programa Apolo, en el cual las tormentas solares son mucho menos habituales (repito, es posible que me equivoque, me pareció leer algo al respecto hace unos años).

  12. Descanse en paz.
    Otro protagonista del progama Apolo que fallece sin haber visto una continuidad. El programa Artemisa y la Moon ship ahí siguen en fase de proyecto o preparativos.
    La muerte es un proceso triste pero también forma parte de la vida. Lo que me alegra dentro de la tristeza de la muerte de este hombre es que esa muerte ha venido a una edad normal, 90 años. El ser humano tiene posibilidades de adaptarse al ambiente espacial y a la ingravidez. Los astronautas que viajan al espacio regresan con una esperanza de vida de 90 años. No sufren un cáncer a los dos años de volver de la Luna ni padecen graves deterioros irreversibles de su salud..

  13. seguro que su ultimo pensamiento seria aquella imagen de la superficie lunar , solo orbitando y esperando por sus compañeros . no es por ser poetico pero que sensacion debe ser estar aislado a 400 mil kilometros , mirando por la ventana . ¡que sensacion de orgullo y grandeza se debe de sentir ¡ . Muchos huevos y cabeza le echaron esta gente , como decia un comentario arriba . Ojala que el hito que marcaron para la humanidad se perpetue en algun momento.D.E.P .

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