Tu nave flota sobre lo que parece ser una planicie infinita de un color blanco sucio. Imaginas que te hallas suspendido sobre la superficie de un planeta o satélite, pero sólo con mirar en detalle la ilusión se esfuma. Porque la ‘planicie’ está formada en realidad por millones de bloques de roca y hielo que se mueven en una danza caótica. Miras a la derecha y ves la mitad del enorme disco de Saturno. Frente a ti, colgadas en el cielo, contemplas varias de las lunas del gigante gaseoso. No cabe duda: estás sobrevolando los anillos de Saturno.
Pero la monotonía de los anillos se rompe cuando miras hacia el lado opuesto a Saturno. Te cuesta creer a tus ojos y jurarías que en la distancia puedes ver unas enormes montañas. ¿Montañas en los anillos de Saturno? No tiene sentido, pero a medida que te acercas la imagen es más nítida. Sí, son montañas que superan los tres kilómetros de altura compuestas por los mismos bloques de roca y hielo que forman el resto de los anillos. Con un telescopio puedes ver el movimiento individual del numeroso enjambre de partículas que las forman. Pero, ¿qué hacen allí?
Evidentemente, estas estructuras son inestables. Nacen, crecen y desaparecen en el borde del Anillo B de Saturno, el más denso de todos los que posee este planeta. Aunque el espesor de este anillo no supera los diez metros, las titánicas estructuras del borde alcanzan los 3,5 kilómetros sobre el plano de los anillos. El origen de estas maravillas de la naturaleza es producto de las complejas interacciones de la gravedad de las lunas de Saturno con los anillos. Las partículas que forman los anillos no tienen un tamaño uniforme y de tanto en cuanto aparecen bloques de mayor tamaño que se unen entre sí hasta dar lugar a auténticas pequeñas lunas. Su presencia suele pasar desapercibida porque se camuflan dentro de los anillos.
Sin embargo, estas lunas migran con el tiempo hacia el borde exterior del Anillo B y allí quedan atrapadas por efecto de la gravedad de Mimas, una de las lunas de Saturno. El motivo es que justo en el borde del anillo las lunas están se hallan en resonancia con Mimas, es decir, que por cada rotación de este satélite alrededor de Saturno las pequeñas lunas llevan a cabo otro número entero de rotaciones. A estas resonancias debemos sumar varias oscilaciones que afectan a todo el anillo, unas ondas de densidad en espiral que surgen de forma espontánea dentro del anillo propiamente dicho cuando este vibre con una frecuencia propia. El resultado es que varias lunas pequeñas de cientos de metros de diámetro -puede que de hasta un kilómetro- se apilan en el borde del Anillo B. Allí comprimen el material de los anillos y lo obligan a elevarse por encima y debajo del plano de los mismos, creando un paisaje surrealista tan impresionante como efímero. Las ‘montañas’ se extienden en arcos de 20 000 kilómetros de longitud situados a lados opuestos del planeta.
Las montañas de los anillos de Saturno son uno de los paisajes más fascinantes que podemos contemplar en el sistema solar. Y sin embargo no supimos de su existencia hasta 2009, cuando la sonda Cassini mandó las primeras imágenes de estas formidables estructuras. Cuántas maravillas esperan aún a ser descubiertas ahí fuera.
Referencias:
Wow, impactante. y son solidas? semisolidas? como acumulacion de polvo? eso no me quedo claro.
Acumulacion de rocas y polvo. sólida es la roca, pero el espacio entre ellas es vacío o semivacio
Son escombros flotando en un plano. El tamaño de los escombros es muy variable: de unos centímetros a varios kilómetros.
Si os molan los anillos de Saturno en el docudrama la BBC «Odisea en el espacio» podeís encontrar una simulación muy buena de ellos.Es altamente recomendable y lo podreís encontrar facilmente por internet e incluso adquirirlo a través de la revista «Espacio».
Y en «Wanderers»…
Es un paisaje impresionante y realmente digno de la mejor ciencia-ficción -Mimas con el cráter Herschel incomoda un poco, eso sí-. Lástima que parezca que vamos a tener mucha suerte si en el transcurso de nuestras vidas vemos eso a través de las cámaras de una sonda espacial, por no hablar de naves tripuladas viéndolo en directo.
Y cual puede ser el espesor de esas estructuras montañosas, y cuanto tiempo pueden perdurar
Como se dice en el artículo 3,5 km sobre el plano de los anillos. Sobre el tiempo, no lo se pero si están en resonancia con Mimas, lo más probable es que duren una fracción de órbita de esta.
Nunca imaginé que pudiera existir nada semejante. Gracias por compartirlo con nosotros, Daniel.
Ola, Saturno es el planeta preferido de muchos aficionados y no es para menos. El juego de resonancias, carambolas y colisiones producen un espectáculo único en el Universo conocido. Nuestra imaginación sideral se desata ante el supuesto planteado por Daniel. Pondremos música de Vangelis mientras volamos cerca de esas efímeras cordilleras…
Pues sí: ¡cuántas maravillas nos esperan aún ahí fuera!
Yo tampoco sabía nada de estas curiosísimas estructuras. Gracias, Daniel, por tu inestimable labor divulgadora.
gracias por las respuestas!!!!!!
Ni idea de que fuesen estructuras tan impresionantes… que pasada…
Gracias Dani!
hum… me hizo recordar las incógnitas estructuras que investigaba la Solarística
Hay que enviar cassinis a todos los planetas, hacerlas en serie las abaratará.