CoRoT-2b, un mundo bañado en rayos X

Por Daniel Marín, el 21 septiembre, 2011. Categoría(s): Astronomía • Exoplanetas • sondasesp ✎ 4

Sí, ya sabemos que todas las estrellas emiten en rayos X y que por lo tanto todos los exoplanetas reciben una mayor o menor dosis de radiación de su astro. Pero el caso de CoRoT-2b es excepcional. Este planeta de 3,31 veces la masa de Júpiter está sometido a una dosis de rayos X cien mil veces superior a la que la Tierra recibe del Sol. El efecto sobre el exoplaneta es brutal. CoRoT-2b se ha hinchado bajo el efecto de este bombardeo y además está perdiendo unos cinco millones de toneladas de materia cada segundo.

Bien es cierto que CoRoT-2b está situado mucho más cerca de su estrella (a tan solo 4,5 millones de kilómetros) que la Tierra lo está del Sol (150 millones de km), pero no es menos cierto que CoRoT-2b es una estrella de tipo solar (G7) con una composición aparentemente normal. ¿Qué es lo que está pasando? Pues simplemente, y como nos ha revelado el telescopio espacial Chandra, que CoRoT-2a es una estrella muy joven, de tan solo 100-300 millones de años. Y si por algo se caracterizan las estrellas jóvenes es por poseer un potente y turbulento campo magnético que genera gigantescas manchas estelares, fulguraciones, radiación de alta energía y eyecciones de partículas.

El caso de CoRoT-2b no es único -existen otros mundos con atmósferas hinchadas, como HD 209458b o HD 189733b-, pero es especialmente interesante porque permite estudiar de primera mano qué es lo que sucede con los júpiteres calientes situados en sistemas muy jóvenes. ¿Son destruidos por sus estrellas durante esta fase de excepcional actividad magnética? ¿Se produce algún tipo de interacción a gran escala entre el exoplaneta y la magnetosfera estelar? La respuesta a la primera pregunta es, al menos en el caso de CoRoT-2b, negativa, pero otros planetas podrían sufrir una erosión descontrolada por culpa de la radiación. En cuanto a la segunda cuestión, se cree que los júpiteres calientes acelerarían ligeramente la rotación de su estrella, manteniendo esta gran actividad magnética característica de la fase juvenil durante más tiempo.

CoRoT-2 destaca también por ser una estrella binario, con una compañera rojiza (K o M) situada a poca distancia, aunque aún no está demostrado que esta estrella esté físicamente relacionada con el sistema. De confirmarse, CoRoT-2 sería uno de los 40 sistemas binarios conocidos que contienen exoplanetas.

A la izquierda, fotografía obtenida combinando imágenes en visible y rayos X de Chandra. Junto a CoRoT-2a se ve una pequeña estrella que podría ser una compañera del sistema. A la derecha, representación artística de CoRoT-2b (NASA). 

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Por Daniel Marín, publicado el 21 septiembre, 2011
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