Cuando el Challenger casi aterriza en Zaragoza

Por Daniel Marín, el 23 febrero, 2011. Categoría(s): Astronáutica • NASA • Shuttle • sondasesp ✎ 22

El 29 de julio de 1985, el transbordador espacial Challenger despegó impecablemente desde la rampa 39A del Centro Espacial Kennedy en lo que sería su octava misión, la STS-51F. Siete astronautas viajaban en su interior mientras la majestuosa nave se elevaba hacia el cielo. Dos minutos después se separaban los dos cohetes de combustible sólido (SRB) y el Challenger continuó su viaje hasta el espacio impulsado por los tres motores principales (SSME, Shuttle Main Engines). Los tripulantes respiraron aliviados. La fase más crítica de su misión quedaba atrás, ya que mientras los SRB están funcionando es imposible efectuar cualquier proceso de aborto en caso de emergencia. Sin embargo, cinco minutos y 43 segundos tras el despegue, cuando el Challenger se encontraba a 108 kilómetros de altura, los dos sensores de temperatura del motor principal número uno (SSME 1) marcaron súbitamente unos niveles fuera de los límites operativos, forzando su apagado por parte de los ordenadores principales (GPC, General Purpose Computers) de la nave. Era la primera vez que un motor principal fallaba durante una misión del shuttle.

Lanzamiento de la STS-51F (NASA).
La tripulación: Gordon Fullerton, Roy Bridges, Story Musgrave, Anthony England, Karl Henize, Loren Acton y John-David Bartoe (NASA).

Los astronautas recibieron la noticia con preocupación. Si se apagaba otro motor más, los procedimientos de emergencia no garantizaban la supervivencia de la nave y su tripulación. El ingeniero de vuelo Story Musgrave -sentado en la cubierta superior de vuelo detrás del piloto Roy Bridges y el comandante Gordon Fullerton- consultó rápidamente el manual para asegurarse de los pasos a seguir. En esa situación tan crítica, su opinión era vital a la hora de decidir qué hacer a continuación. El manual era claro: sólo existían dos opciones ante el fallo de un motor principal en esta etapa del vuelo. Una era continuar ascendiendo hasta el espacio solamente con dos SSME y posteriormente encender los pequeños motores de maniobra orbital OMS (Orbital Maneuvering System) para compensar la pérdida del primer motor. Esta maniobra se denominaba ATO (Abort To Orbit) y, pese a su engañosa sencillez, nunca se había intentado antes. La segunda alternativa era mucho más arriesgada. El transbordador estaba demasiado lejos de Cabo Cañaveral para intentar regresar a la base, pero todavía podía intentar aterrizar al otro lado del Atlántico llevando a cabo un «aborto transoceánico» o TAL (Transoceanic Abort Landing). Existen varios aeropuertos que pueden ser usados para un aborto de este tipo (TAL sites) dependiendo de la misión. En el caso de la STS-51F, el TAL site era la base de Zaragoza.

Carta de navegación de la NASA donde aparece Zaragoza (NASA).
TAL sites. La base de Morón es otro TAL Site para algunas misiones. Además, el aeropuerto de Gando en Gran Canaria también es uno de los lugares donde puede aterrizar un transbordador en caso de emergencia (NASA).

«Nos vamos a España. Las cosas pintan mal», mascullaba Musgrave mientras hojeaba el manual. Karl Henize, sentado junto a Musgrave, preguntó, «¿a dónde vamos, Story?». «A España, Karl», respondió su compañero. De haber recibido la orden de Houston, Fullerton sólo tenía que colocar un pequeño selector del panel de mandos en la posición «TAL/AOA» y los ordenadores del Challenger se habrían encargado de maniobrar la nave hacia Zaragoza. Pero esa orden nunca llegó. «Abort to ATO» sería la decisión final del control de Tierra. El Challenger alcanzaría finalmente el espacio, pero no sin contratiempos. Después del fallo del primer motor, los sensores de temperatura del los otros dos SSME restantes también empezaron a marcar lecturas anómalas que podrían haber propiciado su apagado prematuro y una muerte segura para los siete tripulantes. Afortunadamente, el ingeniero del control de vuelo Jenny M. Howard recomendó que la tripulación desconectase el modo de apagado automático de los SSME por parte de los ordenadores del shuttle. Su rápida decisión les salvó la vida, porque -como se sabría después- el problema estaba localizado en los sensores de temperatura, no en los motores.

El marcador del modo de aborto del panel de mandos del Challenger en posición ATO. Al lado se aprecia la posición TAL/AOA (NASA). 
Distintos tipos de abortos del shuttle (NASA).

El Challenger alcanzaría una órbita mucho más baja de la inicialmente planeada (230 x 174 kilómetros en vez de 390 kilómetros), pero pudo completar su misión exitosamente. Eso sí, durante unos segundos estuvimos muy cerca de contemplar un transbordador aterrizando en España.

Carga útil del Challenger en la STS-51F, el observatorio astronómico Spacelab-2 (NASA).
Emblema de la misión (NASA).

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22 Comentarios

  1. Pues menos mal que desconectaron el apagado automático de los SSME, si no, la ATO tampoco habría funcionado y Musgrave no habría podido volver a subir años despues para la misión de reparación del Hubble.

    Interesantísimo artículo.

  2. Buena entrada, Daniel.
    Muy oportuna además porque esta noche lanzan la STS-133 y por supuesto somos TALsite. Por aquí está Jim Dutton de astronauta de enlace.
    Y tengo el coche en marcha y la cámara de fotos preparada por si alguna vez vinieran 🙂 aunque nunca espero un aborto en una misión.

    Me encanta la foto del panel donde aparece el selector de Modo de Aborto. Y gracias por el enlace a mi blog.

    @Zanstel
    Yo también estaba en Zaragoza y no era nada crio, y si preguntas a cualquiera por aquí una gran mayoría no sabe nada de nuestra implicación en los vuelos del Shuttle. ¿Vivías cerca de la pista de aterrizaje?

    Saludos.
    Carlos

  3. Tengo por entendido que cuando despega un transbordador se van responsables de la nasa a los aeropuestos asignados para caso de aborto. Es eso cierto?

    Por cierto… que se acuerde la NASA que aquí en Valencia tenemos la ciudad de las ciencias, ya nos llega el ave, hemos tenido la copa america etc…
    Ah!!! y que otra ventaja de haber aterrizado aquí es que hubieran probado la horchata les huberemos invitado a comer una paella y posiblemente hubieran visitado las fallas 😉

  4. Bueno… Mi padre era militar, y trabajaba en la base, aunque nosotros vivíamos cerca del estadio de fútbol.

    Supongo que fuí de los primeros en enterarme. 🙂

  5. @zanstel
    Suponía que tenías contacto con la Base, porque en la ciudad, como te comentaba, nada de nada.

    @jose manuel celemin
    Así es. Además de tener algunas instalaciones propias, despliegan un Lockheed C-130E Hercules
    de la USAF y un avión tipo Learjet o similar, que es el que utiliza el astronauta asignado. Una vez que estuve en la Base en una jornada de puertas abiertas (coincidía con un despegue) habían traido un Fairchild C-26D Metro 23 de la USNavy.
    Saludos.

  6. @TALsite
    ¿Has pensado que con el actual presupuesto de la NASA y la próxima cancelación del Shuttle, si se produjese un TAL en esta misión, probablemente la lanzadera se quedaría en Zaragoza…?

    Luis RJ

  7. @Daniel Marín
    No sólo es el 747 también es la grua, y llevarlo todo hasta allí…
    …vale, vale, ya sé, pero soñar es gratis, por si acaso no se si sacarme el pasaje para Zaragoza…

    Luis RJ

  8. Daniel, gran entrada. A todo esto, ¿es verdad que uno de los puntos de aterrizaje de emergencia de los transbordadores era (o es) la Isla de Pascua?

    un saludo desde Chile..

    Pablo Padilla Rubio

  9. ¡Enhorabuena por tu blog, Daniel!
    Estás consiguiendo que mucha gente se aficione a la astronomía y a todo lo que tiene que ver con el espacio, como es mi caso (aunque yo no creo que fuese capaz de aprender ruso por afición, ni tampoco por obligación ;).

    Aprovechando que hoy será el lanzamiento del Discovery (a las 22:50 hora española, creo), ¿podrías dedicar una entrada en tu blog sobre la misión STS-133?

    Según la página: http://www.heavens-above.com, la EEI pasará por tierras gallegas el viernes 25 sobre las 19:10, por desgracia la luminosidad del ocaso no creo que nos permita ver la luz que refleja del sol. En cambio, el dia siguiente puede que sí (alrededor de las 19:36), pero ya no atravesará la peninsula (dirección NE, más allá de Galicia, aunque es posible que se vea también desde el sur).

    ¿Puedes decirnos cuanto tardará la maniobra de acoplamiento?
    ¿sabes cuál de las naves aparecerá por el horizonte en primer lugar?

    Un saludo para Daniel y todos los lectores del blog.

  10. hubiera sido bonito que el unico aterrizaje estranjero del programa espacial americano hubiera sido en españa. no se si me aquivoco hay algun aterrizaje de una nave americana en el estranjero

  11. Lo desconocía por completo, con tu blog me entero de un montón de cosas acerca de la historia de la exploración espacial, Daniel. A ver si un día nos puedes hablar de como es la infraestructura de apoyo que prepara los sitios de aterrizaje de emergencia, como los de Zaragoza y Morón.

    Al final la tripulación de Challenger se perdió probar las migas y el chilindrón. 😀

    No lo puedo asegurar, pero quizá en esos días estaba en Zaragoza, porque en época de vacaciones íbamos allí a ver a mis abuelos; parte de mi familia es de allí (yo nací en Zaragoza, y siempre me hizo mucha ilusión de que la base aerea de allí fuese una pista de emergencia para el transbordador).

  12. Del despegue (ahora mismo) del STS-133:

    #
    ‘Single Engine OPS 3’
    Thu, 24 Feb 2011 10:59:46 PM GMT+0100

    Discovery could still make it to its transoceanic abort landing site in Spain on a single engine if two were to malfunction. All three engines are performing well.

    Salu2.

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Por Daniel Marín, publicado el 23 febrero, 2011
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