Un descanso digno

Por Daniel Marín, el 3 marzo, 2008. Categoría(s): Astronáutica • Aviación • Rusia

El OK-GLI, también conocido como BTS-002, fue una réplica del transbordador soviético Burán usado para pruebas atmosféricas, es decir, el equivalente del Enterprise americano. Sin embargo, mientras que el Enterprise despegaba encima de un Boeing 747 modificado y se separaba en vuelo, a principios de los 80 la URSS no había desarrollado aún el Antonov An-225, y el Myasischev VM-T Atlant era incapaz de llevar el OK-GLI a sus «espaldas». Por este motivo se decidió incorporarle cuatro reactores para que éste pudiera despegar como un avión convencional y realizar las aproximaciones y aterrizajes con tripulación (en un primer momento, el Burán también debía llevar dos turborreactores). Además se le dotó de un tren de aterrizaje delantero más alto para incrementar el ángulo de ataque y, por lo tanto, la sustentación durante el despegue. El OK-GLI realizó 24 vuelos tripulados entre 1985 y 1988, aterrizando automáticamente en varios de ellos. Todavía hoy se hace raro contemplar un «transbordador espacial» despegando como un avión, aunque el OK-GLI nunca fue diseñado para viajar al espacio.


El OK-GLI despegando (www.buran.ru).

Tras el colapso de la URSS y la crisis de los 90, el OK-GLI fue víctima de una rocambolesca historia que simboliza el destino del programa Burán. En 1999 una compañía australiana lo compró para exponerlo en Sidney durante las Olimpiadas del año 2000. Fue parcialmente desmantelado y embarcado rumbo a Australia. Tras ser expuesto en varias ciudades del país, la empresa encargada de su mantenimiento entró en bancarrota y su propiedad volvió a manos de Molniya, la constructora del vehículo. Sin embargo, la compañía rusa carecía del dinero necesario para traerlo de vuelta a Europa, por lo que esta joya de la ingeniería aeroespacial rusa permaneció literalmente abandonada durante meses en un parking de Sidney mientras era víctima del vandalismo. Posteriormente, otra compañía de Singapur volvió a comprar el OK-GLI a Molniya para exhibirlo en Bahrein en 2002. La aeronave fue transportada desde Australia, pero esta compañía también sufrió problemas financieros. Como resultado, el OK-GLI se estaba pudriendo en el puerto de Bahrein a la espera de que algún inversor caritativo se hiciera con la nave. En 2004, un reportaje en la revista alemana Der Spiegel alertó de la penosa situación del vehículo. Desde entonces se han llevado a cabo gestiones por parte de varias compañías para trasladarlo de nuevo a Europa.


El BTS-002 en el puerto de Bahrein.

Finalmente, el museo técnico de Sinsheim ha sido quien se ha hecho con el OK-GLI con la intención de incorporarlo a su extensa colección de aeronaves, entre las que figura el Concorde. Ahora sí que podemos decir que el BTS-002 tendrá un digno lugar de descanso.

Interesantísimo vídeo donde podemos ver los vuelos de prueba del BTS-002 (por aquel entonces alto secreto) con Igor Volk, Rimantas Stankyavichus, Anatoli Levchenko y Alexandr Schukin.

Vídeo del Burán y el OK-GLI.



Deja un comentario

Por Daniel Marín, publicado el 3 marzo, 2008
Categoría(s): Astronáutica • Aviación • Rusia