El plan soviético para poner un hombre en la Luna mandando previamente el combustible

Por Daniel Marín, el 9 septiembre, 2015. Categoría(s): Astronáutica • Historias de la Cosmonáutica • Luna • Rusia ✎ 22

La Unión Soviética se apuntó tarde a la carrera lunar tripulada iniciada por el presidente John F. Kennedy en 1961. La URSS carecía de un programa espacial unificado con un objetivo claro, pero los planes de principios de los años sesenta pasaban por enviar naves y estaciones espaciales en órbita baja. En 1960 la oficina de diseño OKB-1 de Serguéi Koroliov creó el proyecto de cohete gigante N1 -que sería aprobado oficialmente dos años más tarde- para lanzar estaciones orbitales de gran tamaño y llevar a cabo misiones tripuladas a Marte, pero no a la Luna. El órdago de Kennedy cambió la situación por completo y a partir de 1961 la OKB-1 se apresuró a crear conceptos de misiones tripuladas.

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Plan soviético para mandar una misión tripulada a la Luna usando tres lanzamientos del cohete N1. Dos serían naves de carga y otro una nave tripulada Soyuz modificada (Novosti Kosmonavtiki/RKK Energía).

El primer plan de misión lunar de la OKB-1 estaba limitado por el propio N1, que, con una capacidad original de 75 toneladas, era significativamente inferior al Saturno V de la NASA. Al igual que la NASA en 1961, la OKB-1 decidió emplear un esquema de ascenso directo, una misión que fue denominada L3. De acuerdo con el plan L3 de 1963, una nave Soyuz (7K) modificada se mandaría directamente a la superficie de la Luna sin pasar por la órbita lunar. Para ello sería necesario añadir a la Soyuz una etapa propulsiva adicional con un tren de aterrizaje, mientras que el módulo de propulsión de la Soyuz serviría de etapa de ascenso. En este sentido, la propuesta soviética era muy parecida a la nave Apolo original, concebida para aterrizar y despegar de la superficie de la Luna (motivo por el cual el motor SPS del módulo de servicio del Apolo terminó teniendo una potencia tan elevada). La única diferencia era que la NASA enviaría a sus astronautas a la Luna mediante un único lanzamiento de un cohete Nova (o Saturno C-8), mientras que la URSS necesitaría tres lanzamientos del N1 para ensamblar la nave lunar en órbita baja terrestre. Un N1 situaría en órbita la Soyuz lunar con dos o tres cosmonautas, mientras que los otros dos se encargarían de lanzar dos etapas con el combustible necesario. En el lenguaje de la NASA, la arquitectura original soviética era una combinación de DA (Direct Ascent) y EOR (Earth Orbit Rendezvous).

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Recreación del cohete N1 (http://www.foundation3d.com/).

El sistema EOR, también contemplado en su momento por la NASA, era considerado como de alto riesgo. Hoy en día estamos acostumbrados a los acoplamientos rutinarios de naves espaciales en órbita baja, pero a principios de los años sesenta los acoplamientos eran la pesadilla de los ingenieros espaciales. Para llevarlos a cabo había que dotar a los vehículos de complejos sistemas de control, guiado y, por supuesto, acoplamiento, lo que aumentaba la complejidad y la masa de las naves espaciales de forma considerable.

Pero había otra solución, conocida por la NASA como LSR (Lunar Surface Rendezvous), que pasaba por mandar los elementos de la nave a la superficie lunar. Primero se enviarían las naves con víveres y el combustible para el viaje de regreso y luego se mandaría la nave tripulada. De este modo se podía prescindir de los problemáticos acoplamientos. Cierto es que a cambio era necesario llevar a cabo el triple de alunizajes, pero puesto que en cualquier caso había que alunizar, muchos pensaban que el sistema LSR era preferible al EOR.

Lógicamente, esta opción era considerada la más compleja de todas y se suponía que la URSS no la había tomado en cuenta en sus planes lunares. Hasta la fecha, porque hace poco la empresa RKK Energía -heredera directa de la OKB-1 de Koroliov- ha publicado una fotografía inédita sobre un plan lunar soviético L3 basado en acoplamientos de vehículos en la superficie de la Luna.

Como vemos en la imagen que abre la entrada, este plan L-3 modificado pasaba por llevar a cabo tres lanzamientos de vectores N1. Los dos primeros lanzarían sendos cargueros con combustible, cada uno dividido en tres módulos. El primer módulo sería una etapa superior para escapar a la gravedad terrestre, mientras que el segundo estaría formado por la etapa de descenso con el tren de aterrizaje. El combustible iría dentro de tanques situados en un vehículo móvil con orugas -no se aprecia muy bien en la imagen- de 6 toneladas de masa. La nave lunar tripulada L3 tendría una masa de 7,8 toneladas una vez en la superficie lunar. Los vehículos con el combustible se aproximarían hasta la L3 y se procedería al llenado de los tanques. Consecuentemente, la masa de la L-3 aumentaría hasta las 16 toneladas una vez completada la carga de combustible. Tras completar su misión, la Soyuz/L3 regresaría a la Tierra directamente.

Naves del programa L3. A la izquierda vemos la nave Soyuz modificada. A la derecha los dos cargueros. Cada nave estaba dotada de una etapa de escape y otra de descenso lunar con un tren de aterrizaje (Novosti Kosmonavtiki/RKK Energía).
Naves del programa L3. A la izquierda vemos la nave Soyuz modificada. A la derecha los dos cargueros. Cada nave estaba dotada de una etapa de escape y otra de descenso lunar con un tren de aterrizaje (Novosti Kosmonavtiki/RKK Energía).

Huelga decir que este sistema no sería finalmente elegido. En 1962 la NASA cambió el plan de ascenso directo para el Apolo en favor del novedoso sistema LOR (Lunar Orbit Rendezvous). Con el método LOR se podía reducir la masa de la nave y del cohete de forma significativa. Eso sí, a cambio de introducir un nuevo vehículo, el módulo lunar, y un acoplamiento en órbita de nuestro satélite. La URSS tardaría algún tiempo en cambiar de opinión, pero finalmente optó también por el sistema LOR después de numerosos debates. El nuevo esquema soviético de misión lunar LOR, denominado N1-L3, incorporaba una Soyuz LOK y un nuevo módulo lunar LK. Con el fin de lanzar el conjunto a la Luna, la capacidad de carga del N1 tuvo que incrementarse hasta las 95 toneladas. Pese a todo, el plan N1-L3 presentaba serios problemas de masa y a principios de los años 70 se planteó cancelarlo en favor de un plan mejorado y más ambicioso que incorporaba, nuevamente, varios lanzamientos del N1. Pero para entonces los EEUU ya habían puesto el pie en la Luna y el gobierno soviético perdió interés en la conquista de nuestro satélite.

(http://skrainev.deviantart.com/art/1975-Leonov-on-the-Moon-173543141).
Pintura de Alexéi Leónov en la Luna. Tras él se ve el módulo lunar LK que formaba parte del plan N1-L3 (http://skrainev.deviantart.com/art/1975-Leonov-on-the-Moon-173543141).

 



22 Comentarios

  1. Muy interesante! Tengo entendido que a los EEUU también les costó mucho decidirse por el LOR, el ingeniero que lo propuso por primera vez no fue tomado muy en serio, mientras que Von Braun (y otros) era partidario de un ascenso directo. Tardaron varios años en darse cuenta de las ventajas del LOR…

  2. Desde mi punto de vista el principal problema que tuvo la U.R.S.S es el fracaso del N-1.Todos los lanzamientos de este cohete fueron fallidos y por lo tanto nunca tuvieron capacidad para una misión lunar.Una lástima,recomiendo la serie de la BBC «Space Race» para una mayor comprensión de este tema.

  3. Ola, no amigos, de sueños nada. Ahí está la «ferrea Unión Soviética» (como dice su emocionante himno) que, contra todo pronóstico, fue capaz de subir un ser humano al espacio por vez primera. No iban a ganar siempre, la carrera de la Luna la perdieron pero el legado espacial de la gran URSS no debe ser minusvalorado, ahí siguen las Sputnik dando que hablar.

    No voy a ensalzar aquí aquella ideología alternativa al capitalismo rampante que sigue a lo suyo: depredar. Pero si me tiene un poco harto el «anti URSS/Rusia» del amigo Gómez al que cualquier cosa le vale para quitarles méritos y valor. Da
    la sensación que alguno tuvo a su abuelo en aquella división facistoespañola que acudió en ayuda de los nazis en su agresión a la URSS, encontrándose, ellos si, con la dura realidad de Stalingrado, volviendo para su Estado con el rabo (los que aun lo conservaban) entre las piernas.

    De otra forma, no se entiende esa inquina antisoviética y antirusa.

    1. Yo no tengo ninguna inquina hacia la URSS. Es una parte de la historia como la Alemania nazi o el Imperio Británico. A mí no me han hecho nada, aunque sin duda ucranianos, letones, lituanos, estonios, rusos disidentes e ingenieros y oficiales mandados a Siberia por orden de Stalin no opinarían lo mismo.

      El caso es que la URSS se empeñó en una carrera lunar que, hoy por hoy, sabemos que le hubiera sido muy difícil ganar. Sí, construyeron buenos cohetes, pero el más importante, el N1 no funcionó. Presentaba notables carencias y era tecnológicamente inferior al Saturno 5. Por no hablar de la informática y la electrónica.

      Y si la URSS logró poner el primer satélite y el primer hombre en el espacio no fue por su espíritu filantrópico y desinteresado, sino por su necesidad de disponer de un cohete muy potente para poder lanzar bombas atómicas sobre Occidente. Sus bombarderos no daban la talla y sus bombas eran muy pesadas.

      Cada cosa en su sitio.

      1. Menos mal que no se ha dedicado a ensalzar «aquella ideología» 🙂

        Vamos, esto es un blog de astronáutica, en el que por cierto se cuentan más cosas del programa de la URSS que en la mayoría, y no creo que haya que mezclar las cosas y menos mentar a la división azul ni nada por el estilo.

        El comentario de que los errores se pagan es una realidad, pero se aplica a todos. Las Agencias Espaciales tienen un gran historial de ellos y eso es normal en gente que hace las cosas que nadie ha hecho. Yo personalmente no me burlaría nunca de ninguno de los tipos que de repente tienen que pensar en la manera de llevar a alguien nada más y nada menos a la Luna. Cualquier tontería que se les ocurriese tenía seguramente más sentido que las ocurrencias de la mayoría de las personas normales haciendo lo que siempre hacemos.

        Y ya que hablamos de astronáutica, Sputnik sólo hubo uno. En cambio Soyuz hay un montón 😀

          1. La fecha exacta no la tengo en este momento pero fue en 1963 ó 1964 cuando parecía que la URSS arrasaba en el espacio. El director de la NASA dijo con toda la tranquilidad del mundo que ellos iban a ganar la carrera de la Luna por una razón: tenían mucho más dinero. Ese fue el factor clave y decisivo. Un segundo factor que influyó es que al final USA tuvo una sola direccion y un sólo plan y la aparentemente centralista URSS acabó con ese marasmo organizativo y peleas internas que tan bien nos explica Daniel.

    2. Usted de historia ni puñetera idea aparte de las sandeces varias que le retratan
      La division azul estuvo en el frente norte a 2000 km de stalingrado no se volvieron con el rabo entre las patas,es mas cuando lo intentaron los SOvieticos en krasny bor lo que creian un paseo militar fue un avance de 5 km a cambio de 12000 muertos,la proxima vez que se ponga a escribir sandeces le ruego que por favor se documente antes

    3. Santiago, sólo indicar que la División Azul no combatió para ayudar a los Nazis a conseguir sus propósitos, sino como lucha anti-comunista por motivos de defensa de la religión católica. Esa afirmación que haces es como decir que las tropas Finlandesas que lucharon junto a las alemanas contra la URSS también ayudaban a los Nazis.

      Simplemente fueron, en ambos casos, circunstancias que unieron a Países en contra de un enemigo común.

      Saludos.

  4. Esto del Lunar Surface Redenvouz me hizo recordar el episodio «Araña» de la mini serie de HBO «De la Tierra A la Luna» en donde empezo a barajarse la ideas de como poner un hombre en la Luna en el plazo fijado por Kennedy. Uno planteo la loca idea de realizar el encuentro en la superficie lunar, en donde se pondría un hombre en la Luna y donde luego se buscaría la manera de regresarlo a la Tierra 🙂

    ¿Alguien recuerda una vieja pelicula de los años 60 llamada Countdown(Conteo)? Era protagonizada por James Caan y Robert Duvall. Planteaba que los rusos iban a ganar la Carrera a la Luna, y ya había enviado un cosmonauta ruso a orbitar la Luna. Antes que los rusos dieran el ultimo golpe, alunizar, los norteamericanos enviaron a un hombre. Como el Apolo le faltaba todavía, decidieron enviar un hombre en una capsula Gemini modificada para alunizar directamente., El astronauta luego tendría que caminar algo hacia donde debería estar un establecimiento lanzado previamente para estar ahí hasta que el Apolo fuera a buscarlo.

    Resulta que el vuelo se da, no antes que los rusos hubieran lanzado a sus cosmonautas. Posteriormente el astronauta aluniza y empieza el camino hacia el establecimiento. En el camino se consigue a la nave rusa estrellada con el cadaver de los tres cosmonautas. Como gesto de buena voluntad, el astronauta los acomoda y sobre ellos despliega la bandera de la Union Sovietica. Posteriormente se consigue con el establecimiento y camina hacia alla. Y ahí termina la pelicula.

  5. Nostalgia de lo que nunca fue. Es el caso del modulo lunar sovietico LK, sólo lo vi en acción una vez. Fue en la película Apollo 18, en la que sirve de bote salvavidas para el ultimo sobreviviente yankee que queda en la Luna.

    Cuesta creer que a 50 años de los inicios del programa Apollo y de las pruebas del N1, aún estemos debatiendo como volver a nuestro satélite.

    Nostalgia total.

  6. Desde mi punto de vista, el problema de la urss en la carrera lunar fue organizativo y por lo cual también técnico y económico, se planificó y ejecutó muy bien las anteriores carreras espaciales, sputnik, vostok, sondas… Etc. Pero como dice Daniel, la carrera lunar no, no estaba previsto la osadía de kennedy al proponerla como lo hizo.
    El sistema no estaba preparado para unos cambios tan enormes, y cuando más o menos se decidieron ya era muy, muy tarde.

  7. Este artículo me recuerda a aquel episodio de la serie «De la Tierra a la Luna» en el que explican la génesis del módulo lunar, con todas las ideas previas, algunas peligrosas, otras directamente disparatadas, entre las cuales estaba este concepto, el Lunar Surface Rendezvous, idea que se desechó por la misma razón que los soviéticos, elevaba la masa de la misión a niveles colosales y no resultaba seguro en caso de que la nave no aterrizase con precisión, y la misión del Apolo XI falló el punto de alunizaje por mas de 2 km, de haber optado por esta arquitectura de misión Armstrong y Aldrin habrian muerto allí casi seguro

  8. la entrada es muy interesante pero me gustaría que alguien me ayude por que acabo de instalar el orviter simulation 2014 y no puedo encontrar ningún MOB para hacer las misiones lunajob,luna 24 y vega les prometo que cuando le agarre la mano al simulador y al programa VEGA les subo unos vídeos por mi canal de you tube 🙂

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Por Daniel Marín, publicado el 9 septiembre, 2015
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