Venus. Un infierno que apenas presenta similitudes con el paraíso que es nuestro planeta. Con una presión atmosférica de 92 atmósferas y una temperatura media de 460º C -día y noche-, resulta casi imposible imaginar un lugar más hostil para la vida. Y, sin embargo, ¿podría nuestro planeta estar a punto de convertirse en otro Venus?
Hasta el año pasado, la respuesta a esta pregunta hubiera sido un rotundo y sonoro ¡no! por parte de cualquier astrónomo. La Tierra, hubiera argumentado nuestro científico, está situada claramente dentro de la zona habitable del Sistema Solar, la única zona donde puede existir agua líquida de forma estable en la superficie de un mundo rocoso. No obstante, la pregunta podría tener una respuesta bien diferente. Bien, ¿pero por qué esto ha cambiado de repente? La culpa la tiene un reciente estudio -del que hablamos por aquí– publicado en 2012 que ha vuelto patas arriba la definición de zona habitable. Según los nuevos cálculos, el límite interno de la zona habitable del Sistema Solar estaría situado a 148,5 millones de kilómetros (0,99 Unidades Astronómicas) del Sol.
Puesto que la Tierra se halla a 150 millones de kilómetros (1 UA), es fácil entender la preocupación de algunos investigadores. El término al que debemos tener miedo se llama ‘efecto invernadero descontrolado’ (runaway greenhouse) y es el que sufrió Venus hace miles de millones de años. Hay dos formas de alcanzarlo. La primera es aumentar la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera de forma brutal hasta que la temperatura media del planeta alcance los 373º C, la temperatura crítica superficial del agua pura.
Al llegar a este límite, los océanos de nuestro planeta se evaporarían de forma irremediable poco a poco. El agua de la atmósfera desaparecería por fotodisociación en unas pocas decenas de millones de años y la Tierra se convertiría en un planeta yermo y desértico. Vale, pero 373º C ya es una temperatura de por sí incompatible con la vida animal. Y además, ¿cómo va a alcanzar nuestro planeta semejantes condiciones? Está claro que el efecto invernadero descontrolado no es una amenaza. ¿O no? No tan rápido.
El quid de la cuestión es que el efecto invernadero descontrolado puede aparecer a temperaturas mucho menores, de tan sólo 67º C para una atmósfera con la presión actual y una proporción de mezcla del agua superior a 0,2 (la proporción de mezcla nos dice la cantidad máxima de vapor de agua que el aire puede contener a una temperatura y presión determinadas). Este es el conocido como efecto invernadero húmedo (moist greenhouse) y es la segunda forma de alcanzar un efecto invernadero descontrolado. El aumento de la cantidad de vapor de agua -un potente gas invernadero- en la atmósfera provocará un incremento de las temperaturas que llevarán a la evaporación de más agua de los océanos.
Y suma y sigue. ¿Y cómo podemos alcanzar este escenario tan terrorífico? Pues, según un reciente estudio de (Ramsés M. Ramírez et al.), ‘simplemente’ aumentando la concentración de dióxido de carbono hasta diez veces la actual, más o menos. Afortunadamente, esto es imposible usando nuestra tecnología, pero no hace falta llegar tan lejos. Si incrementamos la concentración de este gas hasta 4-8 veces la presente, muchas regiones del planeta no podrán ser habitadas por seres humanos.
Esta última cifra es importante ya que se calcula que si quemamos todas las reservas de combustibles fósiles -conocidas y estimadas- podemos alcanzar esta concentración sin muchos problemas. Entonces la Tierra estará a un tris de sufrir un efecto invernadero descontrolado y terminar como Venus. Y todo dentro de unos pocos siglos. En realidad, estos modelos son muy pesimistas y es muy difícil -por no decir imposible- que la Tierra se convierta mañana mismo en un infierno venusino por culpa del ser humano. Pero el simple hecho de que esté tan cerca del límite da que pensar. En cualquier caso, con nosotros o sin nosotros, la vida en nuestro planeta está condenada. Los cálculos más pesimistas indican que el continuo aumento de brillo de nuestra estrella provocará el colapso de la biosfera dentro de tan sólo cien millones de años. La culpa de este apocalipsis prematuro será, paradójicamente, de la escasa concentración de dióxido de carbono en la atmósfera.
Según algunos modelos, las mayores temperaturas causadas por el efecto invernadero húmedo retirarán más y más dióxido de carbono de la atmósfera, hasta que la concentración de este gas disminuya por debajo de 150 partes por millón (ppm), el límite inferior para la fotosíntesis. Otras estimaciones más modernas aplazan el fin de la vida hasta dentro de 500 millones de años, cuando se extinguirán las plantas de tipo C4. Las plantas C3 podrán vivir hasta dentro de 900 millones de años. Aunque poco importa, porque el aumento en la luminosidad del Sol terminará por provocar un efecto invernadero húmedo descontrolado dentro de 1400 millones de años. Entonces, por fin, la Tierra será como Venus. Referencias:
- Ramses M. Ramírez et al, How close is Earth to a runaway greenhouse?, arXiv (24 de junio de 2013).
Son importantes entradas como esta, que nos recuerdan la fragilidad de nuestro planeta, y lo importante que es cuidarlo para que pueda vivir estos 100 o 500 últimos millones de años de vida – bueno, de condiciones habitables- que le quedan.
En cuanto a Venus, siempre he creído que su estado actual se debió a su lenta rotación, que provocó que se evaporasen sus océanos, que el agua se disociase por la acción solar y se perdiera en el espacio, y que no hubiera organismos acuáticos cuyo metabolismo convirtiera al co2 de la atmósfera en rocas calcáreas.
De todas formas, el estudio de la habitabilidad de los planetas se encuentra en pañales, y esperemos que próximos avances en esta materia nos permitan conocer mejor este misterio del universo que es la vida.
Muy buen articulo, de hecho es un toque de atencion a que hay que invertir en ciancia y tecnologia con el objetivo de salir de la tierra en el futuro. colonizar marte, titan y preparar el salto a otras estrellas en naves que puedan viajar muchas generaciones.
Hombre, la previsión es para dentro de 100 millones de años, así que de «toque de atención», nada de nada. Esa situación no tiene que ver con nosotros. Nuestros recursos se han de invertir en solventar los problemas actuales. No necesitamos colonizar otros mundos por ahora.
hoy has cogido carrerilla! 4 post en pocas horas, brutal.
La verdad es que se muy poco sobre el tema, pero me resulta muy interesante ver que la tierra está en el borde -por no decir fuera- de la zona habitable, mientras que anteriores calculos sugerian que esta estaba en una zona bastante mejor colocada que los nuevos estudios.
Vaya hombre ya has conseguido que no duerma bien esta noche y las próximas también.
Que ganas de ser cenizo, la vida se agarra a cualquier oportunidad que tenga, la nuestra no pero otras si como las cucarachas, etc.
Saludos jorge m.g.
Daniel se piodria hacer un efecto invernadero acelerado en marte?
Como eres Daniel. No doy abasto a leer todos tus artículos ;-P
El planeta mejor cuidarlo por si acaso. De estas estimaciones a futuro: YA VEREMOS! que dijo un ciego.
Me ha encantado el post! Enhorabuena! Artículos como este son los que me llevan a una fulminante e inapelable conclusión: Nuestro futuro está más allá de la tierra, más allá del sol. Y los primeros pasos se tienen que dar con los programas espaciales.
Por cierto, como dato curioso que siempre me ha llamado la atención: cuando consigamos terraformar planetas, nuestros candidatos iniciales, es decir, los vecinos Marte y Venus, cuentan con características totalmente opuestas. Marte hay que «calentarlo» y dotarlo de atmósfera (y campo magnético!), mientras que Venus es justamente lo contrario, tenemos que «rebajar» su densa atmósfera y enfriarlo…Todo un reto que la humanidad tendrá que afrontar en el futuro, junto con la forma de «viajar» entre las estrellas.
Los programas espaciales pueden ser el último bote salvavidas de la humanidad para no desaparecer en los siglos venideros. Podría ser -es lo mas probable- que no deje rastro alguno y que ninguna otra especie galáctica se entere que existió un planeta habitado por un tal homo sapiens alrededor de una estrella común en un rincón de la galaxia.
Artículos como este deberían insuflar ánimos en la sociedad mundial para que las tecnologías espaciales sean prioridad de una vez por todas.
Salvo que suceda algún cataclismo que replantee todo desde cero, parece que nada va a cambiar la inercia actual…
Venus es un proyecto imposible si lo miras bien. Si el Sol poco a poco se va calentando, y provocará que la Tierra sea inhabitable de aquí a 2000 millones de años, gastar recursos, materiales y dinero, en hacer habitable un planeta que lleva muerto tantos años, es un gasto que jamás sería rentable. Imagina que en 100 años Venus es como la tierra gracias a nosotros , con una temperatura superficial de media de 30°(que es el calor que recibe del sol), pero poco a poco va aumentando la temperatura porque el sol también va aumentando.. Solo provocaríamos otro efecto invernadero! A parte, toda el agua que tenía Venus se escapó al espacio hace ya mucho tiempo (mejor dicho, el sol dividió las moléculas de agua, que eran H2O, en hidrógeno y oxígeno. El oxígeno se combinó con el dióxido de carbono y el hidrógeno se escapó al espacio.. Quedando una atmósfera muy seca.)
Me ha encantado el post! Enhorabuena! Artículos como este son los que me llevan a una fulminante e inapelable conclusión: Nuestro futuro está más allá de la tierra, más allá del sol. Y los primeros pasos se tienen que dar con los programas espaciales.
Por cierto, como dato curioso que siempre me ha llamado la atención: cuando consigamos terraformar planetas, nuestros candidatos iniciales, es decir, los vecinos Marte y Venus, cuentan con características totalmente opuestas. Marte hay que «calentarlo» y dotarlo de atmósfera (y campo magnético!), mientras que Venus es justamente lo contrario, tenemos que «rebajar» su densa atmósfera y enfriarlo…Todo un reto que la humanidad tendrá que afrontar en el futuro, junto con la forma de «viajar» entre las estrellas.
Me recuerda al dialogo de Klaatu con el cientifico
El problema no es la tecnología.El problema son ustedes.uds. no tienen deseo de cambiar.
Entonces ayúdanos en eso.
Es parte de Uds. acaban con el mundo y con ustedes mismos.
En cada civilización tarde o temprano hay crisis.
La mayoría muere.
Nuestro sol se apagó.
Tuvimos que evolucionar para poder sobrevivir.
Entonces Uds. ante la muerte inminente cambiaron… a como son actualmente.
Sí.
Ahí tiene su respuesta. Usted dice que cambiaron ante la posibilidad de morir.
Evolucionaremos solo si estamos al borde del precipicio…
Es una oportunidad,…no nos la quite.
Estamos cerca de lograrlo.
Buenas,Daniel! Yo creo que toda la serie Venera de los rusos han creado sin querer la Panspermia en Venus,teniendo en cuenta los últimos datos de la resistencia de las bacterias en la estación espacial internacional. Los resultados…dentro de millones de años:)
Daniel,yo creo que toda la serie Venera de los rusos han creado la Panspermia en Venus,teniendo en cuenta los últimos datos sobre la resistencia de las bacterias a bordo de la estación espacial internacional. Los resultados se verán dentro de…millones de años!Un saludo!
Extrapolando: las civilizaciones tecnológicas aparecen casi al final, a finales del otoño de la vida en un planeta. Meditemos en las implicaciones.
No tiene sentido lo de la desaparición del CO2, en primer lugar porque mientras exista tectonica de placas, éste se va recoclando, y en segundo lugar porque el aumento de la temperatura provoca que el agua disminuya su PH, y a menor PH, mayor descomposición química de las rocas calizas, lo cual aumenta el nivel de CO2.
Saludos.
El problema, además de que la tectónica de placas también tiene los días contados, es que con una mayor temperatura el CO2 será barrido de la atmósfera y no se regenerará al ritmo adecuado para reponerlo. No lo digo yo, lee el paper, por favor.
Daniel lo he leido gracias, pero no me cuadra del todo.
La reacción CO2+H2OCompuestos organicos se ve favorecida hacia la izquierda con la temperatura.
Pero esto tiene en todo el argumentario hay un fallo mayor, y es que no se tiene en cuenta el aumento de la acided en el agua que tiene una mayor concentración de CO2 en la atmosfera, y que también contribuye a disolver la roca caliza más rapido.
Saludos.
Hasta donde yo sé, lo han tenido en cuenta en el modelo. De todas formas, hay que considerar que estamos hablando de un tema marginal en el paper. Es decir, los autores simplemente recuerdan que existe un modelo que prevé que la vida fotosintética en la Tierra desaparecerá en 100 millones de años. Huelga decir que la mayoría de modelos aboga por una extinción más tardía, de 900-1000 millones de años, por lo menos.
Puede ser, pero es que ese asunto de un planeta de alto efecto invernadero por humedad pero bajas concentraciones de CO2 me cuesta visualizarlo.
Si no lo tengo mal entendido es en las zonas tropicales donde podemos encontrar mayores cantidades de grutas esculpidas por la actuación del agua sobre la roca caliza, y es porque la temperatura favorece la disolución de la roca.
Es solo ese punto el que me cuesta visualizar.
Y si, 100 millones de años parece poco, es practicamente lo que nos separa de la gran extinción del cretacico.
Saludos.
Me temo que este asunto va a llegar a los telediarios, se va a mezclar con el asunto el calentamiento global y va a reinar la desinformación más absoluta, pero para eso están nuestros medios de comunicación, carentes en su mayoría de unos periodistas científicos bién preparados.
El escenario me parece poco probable, aunque doctores tiene la Iglesia.
O bien aumenta considerablemente el aporte de radiación a la Tierra, o aumenta considerablemente la cantidad de CO2, pero muy por encima de lo que se espera de la actividad ahumana. En definitiva, es preciso alcanzar temperaturas que movilicen una formidable cantidad de vapor de agua, que es el gas de efecto invernadero fundamental.
Por otro lado, o me he perdido algo, o no tenía noticia de que se ha determinado que la luminosidad del Sol está aumentando progresivamente… ¿por igual en todas las longitudes de onda? ¿se sabe realmente el impacto de ello en el equilibrio radiativo de la atmósfera?
La perspectiva de un colapso de la vida de la Tierra en un plazo de 100 millones de años (que es un plazo mediano dentro de la escala de tiempo geológica) choca con un hecho: la vida de la que hablamos ha persisitido, durante más de 3 mil millones de años, sí con extinciones masivas, pero con un sentido de continuidad. Si hubiese, creo yo, colapsos tan radicales como los que se apuntan, tendría que haber habido unso cuantos en toda la historia de nuestro planeta.
Hola Miguel. El aumento del brillo del Sol del que se habla en el post es independiente de su variabilidad característica y tiene que ver con los procesos de fusión en el núcleo de nuestra estrella. En este post hablo del tema un poco más y vienen unos gráficos y referencias muy interesantes:
http://danielmarin.blogspot.com.es/2012/11/biosferas-del-canto-del-cisne-la-vida.html
La vida en la Tierra nunca se ha enfrentado a este aumento de brillo sencillamente porque nunca se ha producido (el Sol no ha parado de incrementar su brillo desde que se formó, aunque en los últimos Gaños ha permanecido relatvamente estable). Nos guste o no, la vida llegará a su fin dentro de 1,5 Gaños. Lo interesante es que puede suceder mucho antes por los procesos comentados en la entrada.
En cuanto a lo del cambio climático y los medios, bueno, estamos curados de espanto.
Un saludo.
Ola, resulta interesante poder valorar las dos variables q intervienen en esta ecuación: por un lado el aumento de brillo y más tarde de tamanho del sol y por otro la desaforada actividad humana quemando combustibles fósiles a todo trapo desde hace 200 años en una evolución de más de 4000 millones de años… Ante la primera posibilidad poco podemos hacer, pero dela segunda hay muchos que conciben la Tierra como un ser vivo y el ser humano que acaba de llegar a escena (como quien dice) es un tumor en este perfecto sistema que crea y protege la vida, algo que no hemos visto ni de cerca en nuestras observaciones del vecindario próximo y lejano.
No se trata de simpatizar con ecologístas, naturistas o como querais llamarle, es el sentido común (el menos común de los sentidos) el que debe llevarnos a cambiar este sistema depredador que acabará por matarnos y será una pena porque soy de los que piensan que el Universo ha tomado conciencia de su grandeza gracias a nosotros… Por qué ese afán autodestructivo alimentado las más de las veces por intereses bastardos??
Enhorabuena por el artículo y discupas si me he extendido de más pero este tema me hierve ; )
Saúdos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Dejando a un lado lo improbable del escenario apocalíptico «efecto invernadero húmedo» y sus como mínimo discutibles predicciones por efecto de la combustión de TODAS las existencias de hidrocarburos (incluidas aquellas que son inaccesibles, por no hablar de lo de la temperatura de 67º), habría que recordar que la vida en la Tierra ya se las tuvo que ver con niveles altísimos de CO2 sin que esto se convirtiera en Venus.
En concreto, en el perído Ordovícico-Silúrico y el Jurásico-Cretácico (hace 440 y 150 millones de años), los niveles de CO2 estaban cercanas a los 5.000 ppm (partes por millón en volumen) y cerca de 3.000 ppm, respectivamente. ¿Se acabó el mundo?
Por otro lado, si nuestra especie consigue sobrevivir a guerras, epidemias, asteroides y superovas durante los proximos 100 millones de años tengan demasiados problemas para enfrentarse a cuestiones de ingeniería climática planetaria o, simplemente, para evacuar el planeta y buscarse un nuevo hogar. ni siquiera creo que dentro de 500 ó 1.000 años les preocupe.
La verdad, ese «paper» parece «un poquito» sensacionalista.
Efectivamente, Hilario, tienes razón. Los autores del paper ponen al Cretácico como límite superior de concentraciones de CO2 para su modelo. Vamos, que lo tienen en cuenta. No olvidemos que es eso, un simple modelo.
Es que ese es precisamente el problema, Daniel. Los «simples modelos» son usados como verdades reveladas cuando no son más que simplificaciones informáticas de realidades muy complejas. A fin de facilitar el cálculo, se minusvaloran datos, se omiten otros, se sobrevaloran algunos y se «suponen» los que se desconocen. El resultado es que de un modelo puede salir cualquier cosa.
Ese ha sido uno de los problemas de los famosos modelos del IPCC y de ahí derivan sus fracasos: ni se comprende todavía el funcionamiento completo del sistema climático, ni se tuvieron en cuenta elementos determinantes como el vapor de agua o las nubes, se minusvaloró el papel de los océanos en la regulación térmica, se tomaron como «aumentos de nivel del mar» meros fenómenos de expansión, etc. El resultado está ahí.
Por otra parte, decir que «con concentraciones de 4 a 8 veces las actuales de CO2 habrá regiones del planeta inhabitables para el ser humano» (que es el más adaptable de cuantos han existido en la Tierra) cuando sabemos positivamente que con concentraciones de 9 y de 14 veces superiores en el pasado la vida se desarrolló sin problemas en la Tierra y que en cualquier aula de colegio se alcanzan los 3.000 ppm de CO2 tras varias horas de clase, sólo merece un calificativo: alarmismo gratuito.
Saludos
Saludos
Bueno, cuidado, no nos deslicemos por la procelosa pendiente del negacionismo en el cambio climático. Son ‘simples modelos’ -o no tan simples-, sí, pero es que la ciencia trabaja a base de modelos. No hay ni una sola rama de la ciencia que trabaje con un modelo que refleje la realidad -sea lo que sea lo que entendamos por realidad- en un 100%. Todo en ciencia son modelos. El que un modelo sea mejorable -siempre lo es- no implica que sea falso o que pueda ‘salir cualquier cosa’. No, la ciencia no funciona así. Pero si mezclamos política con ciencia y dejamos que nuestros prejuicios nos nublen la vista, pues peor.
Me gusta la discusión entre Hilario y Daniel.
Hilario tiene razón: los modelos climáticos del IPCC, según ellos mismos admiten, se basan en una «jerarquía de modelos» es decir que los modemos complejos nuevos validan los modelos más simples antiguos y viceversa.
La procelosa pendiente del negacionismo del cambio climático te podría resultar tempestuosa si eres un forofo del IPCC. Pero si eres un científico independiente no hay nada de tormentoso. De hecho las tesis del IPCC son pura estafa. Podéis leer mi crítica en:
https://docs.google.com/file/d/0B4r_7eooq1u2ZVlDT2ZNZTRhVzg/edit?pli=1
Antonio/Hilario/Viejo Amigo: por favor, no empieces a contestarte a ti mismo con diferentes nombres, que luego se te va de las manos. Sé quién eres y no tengo ganas de estar borrando tus comentarios, que ya te he borrado decenas en el pasado y por lo visto volveré a hacer en el futuro. Supongo que no tienes nada mejor que hacer que leer y comentar en mi blog, lo cual lo encontraría muy halagador si no fuera por tu tendencia a trolear en plan psicópata y tu odio hacia mi persona.
Nada más, amigo. Simplemente te dejo este mensaje para que sepas que te tengo vigilado y que me lo paso pipa viendo tus intentos por comentar haciéndote pasar por otros. Que te quede muy claro que cuando decido publicar tus comentarios sé que son tuyos, my friend…
Pues eso, que te vigilo… y a lo mejor un día de estos te llevas una sorpresa 😉 MUAHAHAHAHA
Daniel, te equivocas. No conozco de nada al tal «Antonio». Yo soy Hilario Gómez Saafigueroa, una persona «real».
Creo que en tus foros he puesto como mucho cuatro o cinco comentarios.
Soy un gran fan de tu blog, me encanta la astronomía, la astronáutica, soy miembro de la web de astronomía Latinquasar (donde cito mucho a tu blog), colaborador de su revista y en mis ratos libres escritor aficionado (véase «Los senderos ocultos de los dioses» en Amazon.es).
Que en esta ocasión haya coincidido con «Antonio» (al que no conozco) con el tema de la crítica a los modelos climáticos del IPCC y similares o a las exageraciones que se vierten en el artículo que nos ocupa (que también ha sido puesto en cuestión por otros especialistas), creo que no justifica para nada tu reacción.
Te has confundido de persona. Si tienes problemas con el tal «Antonio» resuelvelos sin meterme a mí en el mismo saco.
Saludos
Daniel, yo firmo con mi nombre. Míralo en el documento enlazado de la crítica al IPCC. Supongo que debe ser difícil esto de discutir por internet, pero no hay que ponerse paranoico. Sigo tu blog desde hace un año y nunca lo he comentado intensivamente. Si un tema me interesa, como mucho, lo comento 4 veces; pero en tu blog nunca he hecho esto (de hecho la mayoría de veces entro como anónimo puesto que tu blog no tiene memoria y no recuerda mi nombre).
Daniel, admiro tu sabiduría en lo que se refiere a la historia de la aeronáutica, la astrofísica, etc. por eso cuando se trata de hablar del cambio climático me sabe mal que metas la pata tan ampliamente. Por eso te envié el documento y por eso te animo a que analices de manera aséptica los datos: lo que defiende el IPCC y lo que yo critico.
En mi anterior comentario se me ha olvidado comentar que ya hay algunas críticas al trabajo de Kopparapu, Ramses Ramírez, Kasting y compañía. POr ejemplo, Colin Goldblatt, un científico planetario de la Universidad de Victoria en Canadá, advierte sobre el hecho de tomar el concepto de la «zona habitable» demasiado literalmente. “Puedo poner un planeta en 0,9 UA y el planeta será perfectamente habitable”, dice Goldblatt. “Puede que no sea donde Kasting desea retirarse, pero las cosas van a vivir allí”.
Dorian Abbot, un climatólogo de la Universidad de Chicago, señala que las temperaturas medias eran unos 10-15 K más calientes durante el período Cretácico y que, “hasta donde sabemos, la Tierra nunca ha estado en un estado de invernadero” como el descrito.
El propio Ramses Ramírez ha admitido que hay dos salvedades importantes asociadas con el trabajo. La primera es la hipótesis de que las atmósferas modeladas ya estén completamente saturadas, es decir, que la atmósfera contanga tanto vapor de agua como sea posible a una temperatura dada. La segunda es que los modelos no incorporan la retroalimentación de las nubes, lo que «podría» ser importante.
¿»Podría»? ¡¡Por favor!! El papel de la capa de nubes juega un papel MUY importante en la gestión de la temperatura terrestre. El problema es que se ha investigado muy poco hasta tiempos recientes y las proyecciones de los muy simplificados modelos del IPCC prácticamente no han tenido en cuenta a las nubes.
Como decía, creo que hay demasiado sensacionalismo y alarmismo en ese trabajo. Desde hace dos meses volvemos a «padecer» la letanía del catastrofismo climático y claro, todo se pega.
Viendo las perspectivas actuales, tenemos que confiar en unos saltos tecnológicos formidables para sobrevivir unos cuantos cientos de millones de años, parece que la tenemos más difícil que los dinosaurios hace 65 millones de años.
Todas las soluciones que se puedan abordar me recuerdan a uno de los últimos capítulos del libro «Pale Blue Dot» de Carl Sagan: la humanidad en estadíos tecnológicos inimaginables para nuestras mentes.
Terraformar planetas, viajar distancias interestelares en naves multi generacionales, usar asteroides como fuente de recursos y vehículo de transporte, se me ocurre que para esas alturas contrarrestar el aumento paulatino del brillo del Sol para posponer el efecto invernadero o incluso alejar la órbita de la Tierra redirigiendo de alguna forma la energía misma del Sol pueden ser temas de los que ya se empiece a hablar sin sonar tanto a locura.
Vamos, que estamos hablando de una civilización de Dioses para nuestros estándares =)
Saludos!
TITAN:No cabe la menor duda que a medida que el dióxido de carbono de la atmosfera vaya disminuyendo la vida lo tendrá mas difícil para sobrevivir pero no debemos olvidar que será un proceso lento la vida se adaptara surgirán organismos que necesiten menos dióxido de carbono para sobrevivir incluso hoy en la actualidad existen organismos que no emplean ni el dióxido de carbono ni el oxigeno para vivir.Existen unas bacterias que aprovechan el gas mas abundante de la tierra.EL NITROGENO.A lo largo de toda mi vida he leído que la vida le quedaba 5000 millones de anos luego 3000 millones luego 1000 millones ahora 500 millones o solo 100 millones a este paso la próxima vez será pasado mañana o la semana que viene.Menos mal que solo son modelos que no reflejan la realidad aun asin ha sido un articulo muy bueno felicidades.